No ha comenzado bien la fase de ascenso para el Recoletas Zamarat que no pudo ganar por tercera vez esta temporada al Celta y tendrá que afrontar el partido de vuelta dentro de una semana en el Angel Nieto con cinco puntos de desventaja que dejan las espadas en alto y al equipo naranja muy comprometido para alcanzar la final four que sería el único premio de consolación para una temporada en la que el objetivo es el ascenso.

Las jugadoras del Recoletas se animan al finalizar el partido.

El Recoletas Zamarat es ya muy previsible para cualquier rival a estas alturas de la temporada y si además, tan sólo consigue defender bien a rachas, pues los problemas se le acumulan aunque el rival de este sábado sea un equipo de mitad de la tabla al que, en teoría, tendría que haber derrotado con autoridad.

Mo Green, con el balón, en dos acciones del partido jugado en Vigo. / Faro de Vigo

Tendrá que recuperar terreno en el partido de vuelta Recoletas Zamora que acabó cayendo en Vigo ante un Celta Zorka Recalvi que se mostró mas resolutivo en el último cuarto tras un encuentro durísimo y muy igualado en el que las defensas se impusieron en todo momento.

Davidova intenta taponar un lanzamiento de Mo Green. / Faro de Vigo

La diferencia que existió en la clasificación de la liga regular no se reflejó en el comienzo del partido jugado en la calurosa tarde de este sábado en el Pabellón de Navia de Vigo, en un partido al que asistió el alcalde, Abel Caballero.

Las jugadoras de ambos equipos, preparadas para reanudar el juego.

Celta y Zamarat plantearon un encuentro cara a cara con intensa lucha, sobre todo, bajo los tableros, y de ahí que el equipo gallego comenzase a sustentar sus opciones en la rusa Davidova que acertó en las tres primeras canastas célticas.

Nneka Szegbo, por su parte, controlaba el rebote defensivo y Ornela Santana realizaba un intenso trabajo en defensa. Pero las anotaciones zamoranas llegaban desde el exterior, con Gala Mestres y Mo Green muy centradas.

Perdían muchos balones las de Carbajal, hasta dos en el primer minuto, pero supieron contrarrestar esos fallos con una clara superioridad en el rebote, sobre todo defensivo, atrapando en los primeros cinco minutos hasta 10 balones, dejando a su rival sin segundas opciones.

Con todo, y pese a que sufrían, las zamoranas conseguían pasar por el ecuador del primer cuarto con una renta de 3 puntos en el marcador (7-10).

Pero las de Jacinto Carbajal seguían perdiendo demasiados balones y mientras, Celta Zorka Recalvi se iba creciendo con el paso de los minutos. Las locales poco a poco conseguían calmar nervios en ataque, tratando de asegurar sus lanzamientos y aprovechando cada balón perdido de su rival para castigar el aro contrario y conseguir dar la vuelta al marcador tras un parcial de 4-0 (11-10, minuto 8).

No quedó ahí la cosa. Las zamoranas no reaccionaban y pese a dos canastas de Waters no conseguían evitar que el rival se fuese al minuto 10 con ventaja, aunque mínima (16-14).

Metió una marcha más el cuadro gallego en el inicio del segundo cuarto, en el que castigó las perdidas de balón del Zamarat, que tenía muchos problemas para anotar y veía como el rival se mantenía por delante en el marcador (21-18, minuto 13). No reaccionaban las zamoranas, que veían como, poco a poco y pese a todos sus esfuerzos defensivos, Celta Zorka Recalvi abría brecha hasta los 6 puntos mediado el cuarto (25-19).

Trató el equipo zamorano de dar un giro al partido intensificando sus labores defensivas y encomendándose a Mo Green, que tras más de dos minutos sin que el marcador se moviese, conseguía neutralizar la renta local con dos tiros libres y un triple que colocaban el 25-24 a 2´36 para el descanso.

Celta Zorka Recalvi no se dejaba llevar por los nervios y un triple de Fequeire le permitía recobrar la iniciativa para plantarse en el ecuador del choque todavía con ventaja en el luminoso (30-28).

Trataban las zamoranas de darle una vuelta al partido y apretaban los dientes en defensa en el inicio del tercer cuarto. Pero también el equipo gallego apostaba por centrarse en labores defensivas y tras el descanso el marcador tardó hasta dos minutos en moverse, con las defensas imponiéndose claramente a los ataques. La primera canasta era para Celta Zorka Recalvi, que aumentaba a cuatro su ventaja (32-28). Pero no perdió la posición ni los nervios el conjunto zamorano, que continuó tratando de crecer desde atrás. La siguiente canasta fue para ellas, aunque tardó otros dos minutos en llegar (32-30, minuto 24).

La dinámica no beneficiaba a ninguno de los dos equipos, que intentaron sacudirse la presión rival buscando lanzamientos desde el exterior, lo que propició un breve intercambio de triples que acabó dando paso a un final de cuarto mas abierto que pasó de la quietud total a las idas y venidas continuas, con alternancias en el luminoso que, una vez mas, sin embargo, dejaban a las locales de nuevo por delante al minuto 30 (41-40).

Las cosas no mejoraron para el Zamarat en el inicio del último cuarto, con un parcial de 4-0 en contra en los primeros dos minutos que, tal y como estaba el partido, se antojaba un mundo. Pero Latorre acudió al rescate de las suyas cuando más la necesitaban y, con cinco puntos consecutivos, igualaba de nuevo la contienda a 7 minutos del final (45-45). Sin embargo daba la sensación de que Celta Zorka Recalvi llegaba más fresco a esta recta final del encuentro, mientras que Recoletas Zamora sufría con cada balón, le costaba mover la pelota y generar juego y al final eso, junto al desgaste físico, acabó pasándole factura. Las gallegas lo vieron claro y aprovecharon el cansancio del rival para meter una marcha más y volver a irse en el marcador hasta los 7 puntos (54-47).

Quedaban dos minutos, pero aunque lo intentó todo, el conjunto de Carbajal ya no pudo hacer nada ante un Celta que apretó los dientes en defensa para mantener su renta y acabó sumando el triunfo.

El equipo naranja no está donde se esperaba

El Recoletas Zamarat demostró ayer que su juego no es el que cabría esperar de un equipo diseñado para ascender, que ha ido manteniendo a duras penas el nivel que se le exige pero ahora, en el momento de la verdad, está defraudando, como ya lo hizo al terminar cuarto en la liga regular. Nada está perdido porque cinco puntos son remontables la semana que viene en el Angel Nieto, pero en la “final four”, las zamoranas se van a encontrar rivales mucho más fuertes que este Celta, y si no mejoran bastante su rendimiento, nada habrá que hacer en Alcantarilla, donde sí vamos a encontrar rivales que llegan en plenitud de condiciones al momento clave de la temporada.