Esta segunda fase de la Liga se caracteriza por la falta de margen de maniobra de que disponen los equipos para reparar los errores que puedan cometer, pero también por la directa relación que existen los resultados de unos y los de otros. Cualquier resultado que registren los rivales del Zamora le influyen directamente y le obligan a no tropezar porque cada vez queda menos margen de tiempo para reparar los errores.
Al equipo de David Movilla se le agota pues el crédito tras dos jornadas en las que tan sólo ha podido sumar un punto contra el Real Burgos, triste panorama, pero también es verdad que la derrota encajada ayer por el Valladolid Promesas en su visita al Unionistas abre un panorama esperanzador para el equipo rojiblanco que podría meterse de lleno en la lucha por esos tres primeros puestos si hoy consigue ganar a la Cultural Leonesa.
El conjunto leonés regresa al Ruta de la Plata seis años después de que mandase al Zamora a Tercera División con un 0-1 que no se explicaba ni el propio Miguel Angel Alvarez Tomé que ocupaba entonces el banquillo del equipo merengue.
Desde entonces, la Cultural ha vivido buenos momentos con un brillante paso por la liga profesional en 2017-18, al amparo de una afición que ha encontrado una ubicación ideal en el estadio Reino de León. Es uno de los equipos diseñados exclusivamente para conseguir el regreso a la Segunda A y este año lo está dejando patente tras terminar segundo en el subgrupo 1B, tan sólo superado por el intratable Burgos. En esta nueva fase ha dado una de cal, venciendo en su visita al Unionistas (0-1) y otra de arena con el 0-3 que le endosó el Celta B la semana pasada y que le ha dejado en el tercer puesto, a tres puntos del Zamora CF.
Llega pues la Leonesa con una fuerte presión ambiental ya que la victoria del Unionistas ante el Promesas deja a los salmantinos a un solo punto, y si el Celta B se impone hoy al Burgos en Vigo, le apartaría de los puestos de fase de ascenso. Y si perdiera hoy en el Ruta de la Plata, el Zamora igualaría a la Cultural a 34 puntos.
Íñigo Idiákez no podrá contar hoy con los lesionados Julián Luque y Cristian Galas, pero sí podría recuperar a varios jugadores lesionados. El exjugador de la Real Sociedad dirige una Cultural Leonesa que tiene un carácter marcadamente atacante, aunque los riesgos que asume por ello le hacen ser también un equipo relativamente sencillo de batir, un diseño bien distinto al del Zamora que si bien resulta ser un equipo difícil de golear, también tiene bastantes problemas para marcar goles.
En el Zamora CF la situación es muy complicada ya que la plantilla está acusando ya vívamente el peso del final de la temporada y son diez las bajas que acumula entre lesionados y sancionados. Conviene recordar que el delantero zamorano Sergio García y el portero Moha han sido sancionados con dos partidos de suspensión, y David Movilla sigue sin poder contar con dos hombres que han sido fundamentales en su sistema como los centrocampista Delmonte y Astray, a los que se suma otro medio, Abel Conejo.
Conviene recordar también las bajas de larga duración de Asiel, Juanan, Coque y Adri Herrera. Y son duda, Guille Perero y Adri Crespo.
Así pues, David Movilla tiene escaso margen de maniobra para confeccionar la alineación que opondrá hoy a la de la Leonesa.
Villanueva continuaría en la portería. En defensa, Parra y Piña parecen seguros, y en el lateral izquierdo podría entrar Dani H. para que Menéndez se situase como segundo central como solución improvisada.
Carlos Ramos se mantendrá como medio centro, con Dani Hernández de enganche; Vallejo, Perero y Escudero como interiores, y el argentino Coscia se mantendría en el puesto de delantero centro.
