Si hay un deporte que identifique especialmente a Zamora con el Duero, ese es el piragüismo y en ese sentido, el Descenso Ibérico del Duero supone la gran cita anual del deporte rey zamorano con la ciudad de Zamora. La 46ª edición que se celebró ayer vino marcada por la tendencia paulatina en las últimas temporadas al descenso en el número de participantes, un descenso que se produce por diversas razones, pero que hay que parar entre todos.