Vecinos de Cerecinos de Campos: "Nunca habíamos visto una riada igual"

Diputación, Ayuntamiento y vecinos apuntan a la falta de limpieza del cauce del regato como posible causa de la magnitud de la inundación, que ha provocado daños en casas, explotaciones y la muerte de 10.000 pollos

Iván Roales no puede contener las lágrimas al recordar la "histórica" riada que en la noche del sábado inundó Cerecinos de Campos, al desbordarse el arroyo de la Vega por las intensas lluvias. "Está todo destrozado" asegura este vecino que, desde hace unos cinco años, trabaja en una explotación avícola familiar, que ha sido arrasada por la crecida del caudal del regato que atraviesa el casco urbano del pueblo.

Roales se derrumba al recordar a los 10.000 pollos que han perecido como consecuencia de la riada y que el jueves tenía previsto "sacar" al mercado. "No podíamos pasar", rememora con angustia el joven avicultor, quien todavía siente impotencia por no haber podido acceder a la nave para intentar salvar a los pollos y rescatar a los caballos.

"El agua venía del reguero y por el camino; nunca habíamos visto una riada igual" destaca Roales quien, junto a su familia, había realizado una importante inversión en el interior de la nave para la cría de pollos.

Con mucho esfuerzo y trabajo, el avicultor intentaba sacar la explotación adelante, a pesar del incremento de los costes de producción, proyecto que la riada ha frenado en seco y cuyo futuro depende ahora de la valoración de los daños por parte del seguro. Roales tiene claro el origen de la crecida del caudal del arroyo de la Vega. "El regato está muy sucio y no podemos seguir así porque las consecuencias las sufrimos los vecinos".

En la misma línea, el propietario de otra de las naves que han sufrido daños por la inundación, Pedro Luis Anta, aseguró que "llevamos muchos años denunciando ante la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) que es necesario limpiar el arroyo". Puntualizó este vecino y concejal del Ayuntamiento que, por su situación geográfica, Cerecinos de Campos está situado "entre dos laderas", por lo que es frecuente que en el pueblo se registren dos o tres inundaciones todos los años, aunque no recuerda ninguna similar a la del sábado, por "la velocidad y cantidad de agua" y porque "no podíamos hacer nada; ni entrar como otras veces en las naves con los tractores para sacar la maquinaria".

En este punto, explicó que, en época de intensas precipitaciones, en el arroyo de la Vega "se acumula mucho caudal" procedente de los pueblos del entorno, que "desahoga" en Cerecinos de Campos por lo que, "como mínimo, la salida debe estar limpia" para evitar riadas.

Cosechas

A la espera de concluir el recuento de los daños, Anta asegura que ha perdido la cosecha de pipas de girasol del pasado año, que decidió "guardar" en su nave porque "el precio era muy bajo", a lo que añade los registrados en la sala de ordeño, bombas y diferente maquinaria.

Marcelino Gangoso es otro vecino de Cerecinos de Campos afectado por los daños provocados en sus naves por la avenida de agua, en las que almacenaba cereal, así como maquinaria, "que se ha mojado toda". Al margen de las pérdidas económicas, Gangoso no olvida la impotencia que sintió el sábado al no poder acceder a la nave para "sacar" a su caballo, al que el agua "le llegaba hasta la barriga".

La riada también ha provocado daños en ocho viviendas y los efectos de la crecida del caudal todavía se apreciaba ayer en patios y corrales, mientras que la marca de la altura que alcanzó el agua es visible en varias construcciones y en el interior de casas y edificios como el consultorio médico.

VÍDEO | La crecida de una arroyo anega Cerecinos de Campos

M. J. C.

Tras una larga noche de angustia, Cerecinos de Campos intenta recobrar la normalidad, aunque los vecinos tardarán mucho tiempo en olvidar la última crecida del caudal del arroyo de La Vega, que el alcalde, Jesús Deza, no dudó al calificar como "histórica" y que equiparó a otra que, según relatan los "mayores", se registró hace unos 150 años, durante la que el agua derribó los muros de varias casas.

Aunque el sábado se esperaban fuertes precipitaciones, en apenas 20 minutos, la tormenta descargó sobre Cerecinos de Campos unos 50 litros por metro cuadrado, provocando que el arroyo la Vega se desbordara. Aunque para Deza "no toda la culpa la tiene la CHD", recordó que hace más de ocho meses, el Ayuntamiento solicitó autorización para proceder a la limpieza del cauce del regato, en el que se acumulan gran cantidad de hierbas y maleza. Para el mandatario municipal, si se hubieran ejecutado previamente las labores solicitadas, "en ese primer momento, en el que se producen unas lluvias torrenciales tan potentes, si el agua empieza a discurrir y fluye, la inundación habría sido menor".

Deza también reconoció que "hemos pasado mucho miedo porque no dejaba de llover y porque el agua entraba en las naves y las casas", lo que propició que "estuviéramos toda la noche en vela". Uno de los episodios más angustiosos de la riada fue el rescate de dos personas a las que sorprendió el desbordamiento del arroyo de la Vega cuando circulaban por las calles del pueblo en un todoterreno, vehículo que permaneció varias horas sumergido bajo el agua.

Otra de las consecuencias de la última riada es que los vecinos de Cerecinos de Campos no pueden consumir agua del grifo, después de que el lodo arrastrado por la crecida del caudal del regato entrara en el depósito de abastecimiento. Ante esta situación, el Ayuntamiento tuvo que decretar la prohibición de consumir agua de la red municipal por la turbidez que presenta, problema que intentará solventar con la exhaustiva limpieza del depósito. Para garantizar el suministro a los vecinos, la Diputación ha entregado cinco palets de garrafas al Ayuntamiento con el que, desde el primer momento, colabora para que, en la mayor brevedad posible, la localidad recobre la normalidad y, desde el jueves, pueda celebrar las fiestas en honor de su patrón, San Antonio de Padua.

El presidente de la Diputación, Javier Faúndez, se desplazó a Cerecinos de Campos, para supervisar las labores de limpieza de las calles, para las que la institución movilizó a Bomberos del Consorcio Provincial con tres camiones autobomba, una máquina retroexcavadora, y un equipo de operarios del Parque de Maquinaria, que se emplearon a fondo para retirar la gran cantidad de lodo arrastrado por la riada. En la visita, Faúndez realizó un "llamamiento a la responsabilidad" de la CHD, a la que instó a limpiar los cauces de arroyos como el de Cerecinos de Campos, que discurre por el casco urbano, y minimizar riesgos.

En este punto, recordó que en una reunión celebrada hace meses, el alcalde ya le trasladó la necesidad de limpiar el regato para prevenir avenidas, ante la que la Diputación ofreció al Ayuntamiento la maquinaria de la que dispone. Sin embargo, como aclaró, para que otras instituciones, puedan actuar en arroyos como el de la Vega, es necesario el "permiso" de la CHD.

Por este motivo, reclamó al órgano de cuenca que, si no lleva a cabo los trabajos de limpieza de los regatos confiera "prioridad" a los permisos que piden los alcaldes, porque son los que conocen la realidad y las necesidades de sus pueblos, y deje actuar a la Diputación en la época del año en la que desciende el nivel del caudal. La delegada territorial de la Junta, Leticia García, visitó el domingo Cerecinos de Campos para comprobar in situ los daños provocados por la crecida del caudal del arroyo de la Vega y confirmó al alcalde la activación del "Nivel 1" por riesgo de inundaciones.

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