La batalla por el rescate de un pollo de cigüeña en un pueblo de Sayago

El empeño de los vecinos, que no dudaron en pedir ayuda cuando vieron al animal atrapado, y la pericia de los agentes de Medio Ambiente han permitido salvar la vida de un pollo de cigüeña en la torre de Viñuela de Sayago.

Nada más de percatarse de los apuros que pasaba el animal para levantar el vuelo, vecinos de este pequeño pueblo de Sayago dieron aviso a la Guardería Mediambiental de la Junta. Y hasta allí se desplazaron los agentes el pasado sábado. Pero la falta de medios de seguridad impidió el acceso al campanario para pena de un pueblo que no veía la forma de liberar al pollo de cigüeña blanca.

VÍDEO | Rescate de una cigüeña en Viñuela de Sayago

Nadie se dio por vencido y la tarde del domingo los agentes medioambientales volvieron con el propósito de rescatar a la zancuda, con la pata enratada entre las cuerdas con las que arman el nido. Estas aves acostumbrar a cargar con todo tipo de materiales para tapizar sus nidos y las cuerdas usadas en las explotaciones ganaderas se han convertido en una trampa mortal.

Un agente medioambiental y un vecino accedieron al tejado, y con unas cuerdas y un gancho finalmente se consiguió libarar al animal ante el alivio de los vecinos, que siguieron la operación rescate.

"Las cuerdas de paca son un problemón para estas aves" apuntaban desde la Guardería Medioambiental. De hecho, está considerado como una de las principales causa de mortalidad para los pollos de cigüeña blanca.

Las zancudas gustan de aprovisionarse de las cuerdas sintéticas para armar el interior del nido, los pollos quedan atrapados y cuando llega el momento de lanzarse al primer vuelo, se ven incapaces. Algunas crías quedan colgadas del nido y mueren. 

No ha sido el caso. La premura del vecindario en dar la voz de alarma permitió el rescate del cigoñino, que ha sido trasladado por los agentes medioambientales de Sayago al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Villaralbo, donde recibirá la atención necesaria para volver de nuevo a sui hábitat cuando esté recuperado.

El pueblo de Viñuela espera ver en uno días al pollo de nuevo en el campanario de la iglesia mientras agradece la ayuda de los agentes medioambientales por salvar la vida de la pequeña zancuda.

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