La Opinión de Zamora

La Opinión de Zamora

Los cazadores confían en una bajada de temperaturas para salvar la media veda en Zamora

La temporada de codorniz comienza el próximo lunes, pero con el calor las aves han cambiado los cotos zamoranos por otros más al norte

Un cazador en el sur de la provincia de Zamora. | José Luis Fernández

El próximo lunes, 15 de agosto, comienza la media veda para la codorniz, la urraca, la corneja, el conejo y el zorro. La temporada de codorniz se presenta muy poco esperanzadora, el calor ha afectado a la cría y ha generado una gran movilidad en la especie, que ha abandonado las estepas de la provincia de Zamora por otras zonas más septentrionales y menos calurosas, apareciendo incluso en zonas de montaña.

Los cazadores de la provincia reconocen que “no se ve ni una” al pasear por el campo de Zamora, lo que no permite augurar una buena temporada para la caza de este ave galliforme. No sucede lo mismo con otras piezas, como el conejo, que son muy abundantes y “puede ser lo que salve a muchos cotos” en esta media veda, valora el delegado provincial caza en Zamora, José Antonio Prada.

No obstante, el representante de la Federación de Caza no pierde la esperanza del todo en cuanto a la codorniz: “es un ave que sorprende, y parece que van a bajar las temperaturas a partir de la semana que viene, si esto se confirma puede que comiencen a aparecer algunas codornices en la provincia”, razona.

Las máximas a mediados de la próxima semana se situarán en torno a los 26 grados, diez menos que en los últimos días, y además la media veda para la codorniz se prolonga hasta el 18 de septiembre. Aun así, ni las mejores previsiones contemplan que los cazadores puedan alcanzar el cupo previsto en la Orden de este año, de 25 ejemplares por cazador y día.

Para cazar paloma torcaz y bravía habrá que esperar al 25 de agosto, y se podrá hacer hasta el 18 de septiembre. Este ave será un objetivo mucho más fácil, dada su abundancia en la provincia.

La tórtola, un año más, no se podrá cazar al imponerse un “cupo cero” en toda Castilla y León.

El cupo para el conejo lo establece el plan cinegético elaborado por cada coto, y desde la Federación de Caza recuerdan que es responsabilidad de los cazadores “informarse de la cifra y no superarla en ningún caso”, en palabras de José Antonio Prada.

Con la nueva Ley de Caza se podrá salir con menos documentación, pero es importante recordar la novedad de que el cazador debe llevar una autorización del titular o arrendatario, firmada también por el cazador, haciendo constar que este conoce las condiciones del plan cinegético y teniendo que figurar las especies, las modalidades, los cupos diarios y las jornadas autorizadas. Cualquier modelo que cumpla estos requisitos es válido. También existe un modelo normalizado por la Junta de Castilla y León.

Se debe realizar de forma obligatoria un control de capturas de cada jornada y entregarlo al titular del coto al menos cada 15 días. No es necesario hacerlo durante la jornada de caza y se puede realizar en cualquier momento. Para esto también existe un modelo elaborado por la Junta.

Por último, desde la Federación de Caza de Castilla y León recuerdan que, “con independencia de los mensajes políticos e institucionales que se han escuchado”, por razones legislativas y técnicas actualmente la Licencia de Caza no es gratis y su vigencia solo es de un año.

La Federación recogerá datos de la codorniz para un estudio

La Federación de Caza está desarrollando a nivel nacional el proyecto “Coturnix”, sobre seguimiento y reproducción de la codorniz. El estudio está financiado por la mutua de los cazadores, Mutuasport, gracias a los ingresos de los cazadores federados asegurados en esta mutua. Se trata de conservar la especie con un aprovechamiento sostenible. “La recogida y el análisis de datos es cada vez es más determinante para el futuro de la caza, ante el ataque que venimos sufriendo por algunos colectivos y ahora mismo ya desde las instituciones”, advierten los responsables de la Federación. Cada cazador puede recoger información sobre su jornada de caza y facilitar un dato que se convierte en científico a través de una muestra biológica que aporta con las fichas-bolsas de la codorniz.

Compartir el artículo

stats