El Ayuntamiento de Tábara llevará a cabo “cortes de agua a diferentes horas del día y sin previo aviso, en función de la situación de los depósitos, para poder garantizar el abastecimiento de agua potable para el consumo humano e higiene personal”.
Así lo ha decidido la Corporación Municipal que preside el alcalde socialista Antonio Juárez tras detectarse abusos y usos indebidos del agua suministrado por la red general de abastecimiento.
Cada día que pasa son más los pueblos con problemas de agua y si la situación es crítica, en los pueblos pequeños lo es más aún en los grandes como es el caso de Tábara, segundo núcleo más importante de los 102 de la comarca natural de Aliste, Tábara y Alba, sólo por detrás de Alcañices.
Actualmente la villa cuenta con 751 empadronados residentes (372 hombres y 379 mujeres) con lo cual ya se necesita mucha agua para garantizar el suministro. En la época estival las necesidades se acentúan pues la población estacional según los datos ofrecidos por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas supera las 2.000 personas, alcanzando el punto álgido esta semana y la próxima con las fiestas patronales de la Virgen de la Asunción.
Manantiales
Según se expone desde la Alcaldía, “como todos sabemos, estamos en un año extremadamente te seco y los manantiales lo saben mejor que nadie. A pesar de las advertencias que ya hemos realizado con anterioridad, se sigue detectando un usos impropio del agua potable: huertos, piscinas privadas sin depuración, riego excesivo de jardines privados y lavado de coches”. Por estos motivos el Ayuntamiento de Tábara solamente permitirá a partir de ahora el uso del agua potable para el consumo humano y para la higiene personal. Por otra parte se prohíbe tajantemente “El uso de agua potable para regar huertos, jardines privados que no cuenten con programador operativo y eficaz, lavar coches, regar fachadas, y patios y llenado de piscinas”.
La Alcaldía ya ha puesto en conocimiento de los efectivos de la Guardia Civil la problemática situación y la emisión del bando municipal con las prohibiciones “Para que tomen las medidas que de su competencia sean”. A parte el Ayuntamiento ha procedido a contratar un servicio de vigilancia privada para hacer cumplir las medidas impuestas.
La Corporación señala que “el uso de agua potable de forma racional tiene que ser responsabilidad de todos” advirtiendo a los infractores que el incumplimiento de las medidas adaptadas y puestas en vigor conllevará la adopción de las sanciones correspondientes”.
Tábara, localidad ubicada en el entorno de la Sierra de la Culebra, está viendo afectados los caudales de sus acuíferos a causa de la fuerte sequía y las olas de calor, sumadas a la escasez de lluvias a lo largo de todo el invierno, la primavera y el verano. Valga como ejemplo que el arroyo de “El Casal” . Según los propios vecinos, lleva ya más de un año sin correr. Lo mismo le sucede a otros arroyos como Zamarrilla, La Burga, Braña, La Balina, Molino de Enmedio, Urri, Candeo, La Bouza, Palomillo, La Ribera y Rincón.
Acuífero
La villa de Tábara se abastece de un acuífero subterráneo, pozo de sondeo, ubicado en el paraje periurbano de “El Sotillo”, junto al Centro de Salud de Tábara, donde ahora se ha construido y puesto en marcha las nuevas piscinas municipales.
Aunque no cuenta con ríos cruzando por su término municipal, Tábara fue siempre prolífera en fuentes. En entre ellas destaca la fuente “Las Francas” situada en la ladera sur de la “Sierra de las Cavernas”, a una altitud de 953 metros sobre el nivel del mar concretamente debajo de “La Picota”. Una de las fuentes relativamente moderna es la de “La Marquesa” en el paraje de “La Folguera” construida en piedra serreña que recibe el agua mediante tubería del manantial.
Dentro del casco urbano de Tábara siempre fueron emblemática las de “Los Caños”, “La Cañada”, “Los Frailes”, “Victoria”, “La Bajura”, “Escuelas” y “San Lorenzo”.
El vecino e historiador Eugenio Rosado Casado, ya fallecido, fue siempre uno de los grandes defensores de sus fuentes y de su mantenimiento y recuperación: “Fundamentalmente en los pueblos había dos clases de fuentes, urbanas y rurales, amabas totalmente necesarias, ya que en ambos espacios desarrollaban su vida los vecinos”.
Solía recordar el ilustre tabarés sobre las fuentes tradicionales que “Estas, aparte de proporcionar agua a las personas, tenían otro cometidos, abrevadero de ganados, lavadero o combinado de ambos. La fuente siempre fue lugar de encuentro e intercambio de información y de cita y mucho más el lavadero”.
La escasez de agua no afectará de momento al funcionamiento de las nuevas piscinas municipales que mantienen su apertura todos los días de la semana, de 12.30 hasta las 21 horas, hasta el día 2 de octubre.
Los jóvenes de 6 a 16 años abonarán dos euros al día, pudiendo obtener un bono de 15 euros para 15 días. Los mayores abonarán 2,5 euros por jornada. En este caso los bonos por quince baños costara 30 euros.
