La mancomunidad intermunicipal que gestiona el monte Raso de Villalpando , provenientes del aprovechamiento cinegético del bosque y de la explotación de la resina.

Ambos aprovechamientos están adjudicados a dos empresas externas que pagan a la mancomunidad una renta fija a cambio explotar la caza y la resina, respectivamente. Antiguamente, los níscalos y las piñas también generaban ciertos ingresos para la mancomunidad, pero en las actuales condiciones vitales el pinar, de avanzada edad, no genera suficientes setas como para rentabilizar el aprovechamiento micológico. Algo parecido sucede con las piñas del Raso, que hasta hace pocos años también se recogían y vendían.

Sin embargo, la caza genera al monte unos ingresos de 7.802 euros anuales pagados por una empresa leonesa que tiene concedidos los derechos hasta la campaña de 2023, incluida.

En cuanto a la resina, tan solo se explota un sector, ubicado en la zona más septentrional del monte, que incluye cerca de 10.000 pinos. En 2017 se firmó un contrato por cinco años para que una empresa forestal extrajera "a vida" la resina de estos árboles, pagando una cuota fija por cada pie.

En cuanto a los gastos previstos, el personal (Secretaría) cuesta a la mancomunidad 2.500 euros anuales. El resto del dinero se reinvierte en el propio monte, "nuestra idea es devolver al monte el dinero que genera, para irlo mejorando año a año", explica Miguel Barrero Toral, presidente de la directiva que gestiona la agrupación de municipios, y alcalde de Quintanilla del Monte, uno de los 13 pueblos a los que pertenece el Raso.

Entre las actuaciones previstas para el presente año destaca instalar una tubería de 800 metros desde el sondeo que abastece al refugio de cazadores, ubicado en el mismo corazón del monte, hasta la charca más cercana a ese lugar. El Raso de Villalpando cuenta con varias charcas para que no les falte agua a los animales, lo cual asegura la permanencia de la fauna en el monte e incrementa el valor cinegético del mismo. La agrupación de municipios, que periódicamente lleva a cabo acciones de mantenimiento en estas charcas, pretende ahora instalar esta tubería para poder rellenar al menos uno de estos bebederos en caso de que una sequía severa seque por completo las otras charcas.

Según informa el presidente de la mancomunidad, ya existe un proyecto de actuación que está pendiente de aprobación por parte del servicio de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, un trámite necesario antes de licitar las obras.

En el próximo pleno los municipios debatirán otras posibles acciones de mejora del monte en las que invertir en el año siguiente.

En 2019, la mancomunidad también realizó un importante esfuerzo inversor al arreglar el principal camino de este monte, que parte desde el municipio de Villárdiga y termina en el refugio de los cazadores. Esta vía es el acceso más utilizado por todos los camiones que tienen que entrar en el raso por distintos motivos.

Por su parte, la Junta de Castilla y León también contribuye al mantenimiento y la mejora de este bosque, el verdadero pulmón de Tierra de Campos, financiando tratamientos silvícolas por valor de 109.000 euros en tres años, según informaba la delegada territorial en una visita reciente al Raso de Villalpando.