Las repoblaciones con pinus pinaster en montes alistanos, iniciadas hacia 1952 en la comarca por Patrimonio Forestal del Estado (Hoy Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León), trajo consigo que, 66 años después, municipios como Alcañices, Rábano, Trabazos y Figueruela de Arriba cuenten con parte de los mejores pinares de España. Durante años la explotación maderera se restringía a los troncos, mientras que las ramas quedaban abandonadas, convertidas en un auténtico polvorín para los incendios.

Los tiempos han cambiado y desde 2016 de aprovechan también las ramas. La empresa "Bosque Verde & Biomasa y Maderas de Zamora" fue la primera en asumir la molienda entonces de 300 toneladas de materia prima que salió camino de "Cronos Pam" en Burgos y de una empresa en Orense. Una maquina puede triturar una media de 80 toneladas diarias que supone cuatro trailers de biomasa para la fabricación de pellets o la fabricación de aglomerados. No solo hay que aprovechar las copas y ramas de los pinos vendidos. Existe otro problema. Las plantaciones de pinos se hacen con una media de 1.200 plantas por hectárea, pero hay montes donde la regeneración natural alcanza las 3.000. Por este motivo también hay que hacer limpiezas y los pinos cortados, aun no muy grandes, son utilizados para la molienda en unos tiempos donde la demanda de pellets va cada día al alza.