Los responsables provinciales y regionales de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), liderados por Aurelio González, y su secretario general a nivel nacional, el pacense Lorenzo Ramos, visitan hoy las nuevas instalaciones de la cooperativa Cobadú, que el propio Ramos calificó de "muy importante para el campo de Zamora, de toda Castilla y León y del conjunto de España". No en vano la Fundación de Estudios Rurales, vinculada a UPA, reconoció hace dos años a la empresa zamorana Cobadú con el premio al "cooperativismo responsable".

Durante su estancia en Zamora Lorenzo Ramos ha defendido la "agricultura familiar" porque "la PAC no tiene futuro sin ella". Los primeros borradores de los presupuestos de la Unión Europea para el próximo lustro suponen "una rebaja importante" de los fondos destinados a la Política Agraria Común (PAC), por eso desde UPA apuestan porque los Estados aumenten su aportación a los fondos comunes tras el Brexit.

Para esta organización agraria, que se define como "progresista y europeísta", "una PAC fuerte se traduce en una Europa fuerte" porque la política agraria "garantiza una alimentación sana, segura y saludable", además de "darnos trabajo y empleo en el medio rural, para luchar contra el despoblamiento, que es uno de los problemas más graves que afronta Europa", en palabras del secretario general.

Ante unas elecciones europeas que se presentan en "un clima de avance de movimientos populistas y guerras comerciales", lo "ideal" para UPA sería que "los presupuestos se pudieran aprobar antes de las elecciones de mayo", pero temen que probablemente "la puesta en marcha de la PAC se retrasará al menos dos años".

A partir de 2021, la intención de la Comisión Europea es descentralizar la política agraria mediante planes estratégicos nacionales, "y ahora en España estamos debatiendo si debemos de tener un plan nacional o uno distinto por cada Autonomía", ha protestado Lorenzo Ramos, que defiende que "hay ciertos pilares que deben ser iguales para toda España, como el asesoramiento a explotaciones, la incorporación de jóvenes y mujeres, los seguros agrarios o las ayudas para profesionales".

Por otro lado, desde UPA han propuesto un techo máximo de ayudas a explotaciones, "pero descontando el empleo, porque no tenemos nada en contra de las explotaciones que crean muchos puestos de trabajo, sino que pretendemos que ese techo afecte a la agricultura inactiva", ha matizado el líder nacional del sindicato.

En cuanto a la regulación de los derechos históricos, la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos considera que "en España no se puede sustituir por una tarifa plana, no funcionaría". En cambio, proponen ayudas complementarias para que los agricultores jubilados se animen a ceder las tierras a agricultores jóvenes que se incorporen a la actividad agraria.

"Somos sostenibles"

Por último, el líder nacional de UPA presentó ante sus compañeros del sindicato la campaña "somos sostenibles por naturaleza", en la que se defienden frente a los ataques del movimiento ecologista al actual modelo de producción agraria, porque "a los agricultores y ganaderos europeos nadie nos tiene que dar lecciones de ecologismo, somos los primeros que cuidamos la naturaleza, cuando hay un incendio, somos los primeros que vamos a apagarlo", defendió. Lorenzo Ramos recordó que los profesionales del campo a menudo dan cursos de formación y que "las explotaciones agrarias ya no son como hace 30 o 40 años, están limpias, y en la Unión Europea seguimos el modelo más garantista con el medio ambiente y la seguridad alimentaria".

Por su parte, Aurelio González recordó que la ganadería supone el 6% de las emisiones de gases, mientras que el transporte alcanza el 26%.