Medio millar de ganaderos y agricultores defendieron ayer la pervivencia del sector y del medio rural frente "al acoso" de la fauna silvestre, con especial acento en el lobo, del acoso de los movimientos ecologistas "fundamentalistas" y de "las torpezas" de la Administración por ejecutar "una política nefasta y equivocada".
Ganaderos y agricultores protagonizaron la reivindicación, convocada por la Alianza por el Campo Upa-Coag, ante la Delegación de la Junta de Castilla y León, en Zamora, y recorriendo la vías principales portando pancartas y tronando su malestar con sonoros aullidos lupinos y gritos de "menos lobos".
"Menos lobos en el campo", "Sin ganado no hay pueblos" y "Salamanca no es tierra de lobos" fueron pancartas que presidieron la marcha encabezada por los máximos responsables provinciales y regionales de la Alianza. Más luego abundaron los carteles, ya típicos del sindicato, con un voraz lobo llevando en la boca parte de un animal despedazado.
Fue una protesta sin incidente alguno y marcada por el orden, con rugir de pitos y cencerros y algunos petardazos, que la ciudadanía observó con expectación e inmortalizó en sus móviles para dar cuenta de los hechos "urbi et orbi".
El presidente nacional de Unión de Campesinos-Coag, Miguel Blanco, expresó que Zamora es de las provincias más afectadas por los perjuicios de la fauna y del lobo. Justificó la manifestación para defendernos y en legítima defensa frente al acoso e intento de derribo que sufrimos porque nos quieren expulsar del campo. Queremos defender un trabajo muy digno y defender nuestro futuro y el de los pueblos. Para Blanco "no solo es la PAC, los mercados volátiles y especulativos que hunden los precios de nuestros productos, si algo faltaba, también nos acosa la selva y las especies silvestres, que se han ido de las manos a las administraciones públicas y se ha convertido en una auténtica plaga que tenemos soportar y padecer". Puso especial énfasis en señalar el acoso de "aquellos que defienden la fauna desde el fundamentalismo". "Respetamos las organizaciones ecologistas serias, pero censuramos severamente a los fanáticos que cada vez son más y nos acusan y criminalizan y no saben lo que es el campo ni el medio rural, con nóminas que están bien a resguardo y ningún jabalí ni lobo las ataca".
"Queremos decir basta a los ataques del lobo, que cada vez son más insoportables, y del resto de la fauna, con enormes daños a las explotaciones. Queremos exigir a las administraciones que no se pongan de perfil, que tengan valentía y firmeza y estar al servicio de los intereses generales y defender la economía y el medio rural, una economía que no se deslocaliza. Pedimos que tomen medias y no dejen caer a la ganadería extensiva, y que no hundan las razas autóctonas, la economía y nuestros pueblos, que no sigan con las políticas nefastas y equivocadas" exclamó Blanco .
Los resultados en Zamora de 17.000 parados podemos ser más de continuar una nefasta gestión de la política regional y nacional respecto a las especie.
Blanco recalcó que "respetamos los movimientos ecologistas serios, y tenemos encuentros con ellos, pero a los fanáticos del ecologismo les decimos claro que es mentira que el lobo esté en recesión". Precisó que "ha aumento en toda la península más de un 20% en los últimos diez años. Está cuantificado en más de 2.700 ejemplares, con más de 1.600 en Castilla y León, y más de 400 ejemplares en Zamora, que suma más que Alemania y Francia juntas". "El lobo no está en recesión, está en expansión a costa de los ganaderos" remató.
Miguel Blanco quiso desmontar "grandes mentiras". "La primera es la referida a que los daños atribuidos al lobo en la ganadería es de apenas es el 1%. ¿Quién ocasiona es el otro 99%? ¿El pedrisco? El 100% son los lobos, ni perros asilvestrados ni historias. Los datos están ahí. Año pasado 131 ataques con casi 700 reses muertas. En lo que llevamos de año 35 ataques y 170 reses". Criticó que "los partidos políticos y la Administración se hagan eco de propuestas radicales e hizo mención a que Equo y Podemos presentaron una proposición no de Ley -que no prosperó por el final de la legislatura- en la que se pedía la protección estricta del lobo en todo el país". Al respecto, la Alianza pide a las administraciones publicas "que se no se pongan de perfil, que se dejen amedrentar por los fanáticos". Subrayó que "no hay una coexistencia posible con la ganadería extensiva". A viva voz y con gran aplauso dijo que "a las nóminas no las come el lobo". Manifestó, además, que "tenemos razones muy poderosas para que salga una regulación de las especies. No hay coexistencia posible con la ganadería extensiva sino hay una regulación. Jamás pedimos la erradicación del lobo, hablamos de regulación. Necesitamos políticos sensatos que no comentan la torpeza de acabar con las razas autóctonas, la ganadería extensiva y los mercados".
También se dirigió a la presidenta de la Diputación provincial, Mayte Martín Pozo, para que no destine "ni un euro más al Festival del Lobo", y aludió a la manifestación de conservacionistas organizada en Madrid el pasado marzo a favor del lobo.
"Serán muy Twuitter y Facebook, pero en ellas nos amenazan y persiguen, y no son redes sociales sino antisociales, como ellos mismos. Fueron a exigir que se declare el lobo en extinción al sur del Duero y especialmente protegido al norte, que ocupe su espacio natural y se autorregule por si mismo. Eso es una auténtica locura. Hoy los espacios están humanizados y necesitan regulación, nunca diremos extinción" expresó Blanco.
