El expresidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, confirmó hoy en su declaración ante el tribunal de la Audiencia Provincial de Valladolid que juzga el ‘caso Perla Negra’, que no tuvo conocimiento de la compra del edificio de Soluciones Empresariales de Arroyo de la Encomienda hasta un encuentro que mantuvo con Pablo Trillo en septiembre de 2008, en el que entonces vicepresidente de la Agencia de Inversiones y Servicios (ADE) y miembro del consejo de administración de Gesturcal, le trasladó sus “inquietudes” sobre la operación y, especialmente por considerar que los precios que se estaba barajando eran “elevadísimos”.

Herrera, que contestó por espacio de 20 minutos a las preguntas del abogado del entonces viceconsejero de Economía y después secretario general de la Consejería de Economía y Empleo, Rafael Delgado, uno de los principales inculpados en la causa y para quien la Fiscalía pide once años de cárcel, afirmó que no recordaba en el contexto en el que se celebró la reunión con Trillo, pero sí apuntó que en la misma le trasladó que pediría información directa al entonces consejero de Economía y Empleo, Tomás Villanueva. Además, Herrera negó que después de la entrevista con Trillo mantuviera algún encuentro con los responsables de la consejera de Hacienda.

En su declaración, Herrera también defendió la gestión del consejero de administración de Gesturcal y aseguró que fue un acierto confiar en las personas que estaban detrás de esta empresa pública. “Los errores que se hayan podido cometer y que estamos conociendo se producen cuando se prescinde del consejo de administración”, aseguró, para recalcar que la operación para unificar las sedes de ADE tenía sentido y era “coherente” con la línea de trabajo que la Junta había venido realizando para agrupar los servicios.

Preguntado si la compra del edificio de Arroyo fue una decisión política, Herrera aseguró que se trató de la decisión de un consejo de administración “bandera”, formado por personas “muy cualificadas, expertas y que ofrecían garantías”, opinión que, según reconoció, se la trasladó a Tomás Villanueva. Además, indicó que la primera noticia que tiene tras la conservación con Pablo Trillo es que el consejero de administración de Gesturcal acordó por unanimidad la compra del edificio por ser la mejor opción para “los intereses generales”. En este sentido, explicó que tras comunicarle Villanueva la decisión de comprar el edificio, también informó del encargo de una tasación independiente del edificio.