El vicepresidente y portavoz de la Junta, Francisco Igea, ha asegurado que su obligación es “proteger” la vida y la salud de los ciudadanos para lo que adoptan medidas frente a la pandemia del COVID-19, que han llevado a que él, junto al presidente Alfonso Fernández Mañueco, sean declarados personas “non gratas”. “Es lo que nos toca, no estamos aquí para ser agradables o simpáticos. No me he presentado a un concurso de míster España”, agregó.

En la comparecencia por videoconferencia tras el Consejo de Gobierno, Francisco Igea reconoció que son “muy conscientes” de que los diferentes sectores lo están pasando “muy mal” y consideró que todo lo que digan se lo toma como una “reacción humana lógica y comprensible”, porque admitió que lo están “pasando muy mal”. Además, añadió que su obligación como gobernante es “escuchar” y “atender” a la población.

Al respecto, el vicepresidente sostuvo que él no entiende la política como un “concurso de popularidad”, que algunos intentan en su opinión “ganar” en la comunidad. Aseguró que no es esta su “manera”, ni la del presidente de la Junta, sino la de tomar decisiones aunque no sean comprendidas y “encajar” las críticas con “humildad”.

Sin embargo, Francisco Igea admitió sentirse “cansado” de ser el centro de todas las críticas, pero añadió: “No me puedo permitir cambiar de actitud, relajar nuestro trabajo y no me puedo permitir cansarme y entonces, es lo que nos toca, hay que seguir y vamos a seguir hasta que esto se acabe y vamos a estar aquí hasta que esto se acabe”.