Valladolid, Ical

El procurador de Vox, Jesús García-Conde, se quedó solo ayer en el hemiciclo de las Cortes en su pretensión de derogar el decreto de la Memoria Histórica de Castilla y León aprobado por el anterior Gobierno del PP al considerar que vulnera una serie de derechos como la igualdad de todos los españoles y la libertad ideológica. La propuesta de García-Conde recibió duros calificativos por parte de la socialista Patricia Gómez, que tildó de "basura" la proposición no de ley, rechazada por todos los grupos, mientras que PP y Ciudadanos apoyaron que la norma autonómica destine fondos para la exhumación de personas en las cunetas y la reparación de su dignidad. En la presentación de la proposición no de ley, el procurador de Vox, Jesús García-Conde, argumentó que la Ley de Amnistía de 1977 entró "imbuida en un espíritu de perdón" y subrayó que en 2007 entró en vigor la Ley de Memoria Histórica, de la que afirmó que de "un plumazo y movido por un afán partidista y revanchista, quiso borrar la generosidad de aquel acto de perdón mutuo nacional que supuso la Ley de Amnistía". García-Conde asentó en esa ley el decreto aprobado en 2018 por el anterior Gobierno del PP en la Junta