La Comunidad de Regantes del Esla se reunirá hoy en su sede, en Villaquejida (León), para evaluar los daños que las avenidas de finales de año han causado no solo en cultivos y caminos agrícolas (infraestructuras estas que dependen fundamentalmente de los Ayuntamientos), sino fundamentalmente en acequias, canales y presas, según informaron alcaldes ribereños de la comarca que prevén acudir al encuentro a petición de los regantes.

La crecida del río Esla llegó a alcanzar hasta 300 metros de anchura en algunos puntos de la vega leonesa, desde Palanquinos hasta San Cristóbal de Entreviñas, y desde Castrogonzalo hasta Villanueva de Azoague, donde el Esla recibe las aguas de los ríos Órbigo y Tera. Cuando se desbordó su fuerza resulto brutal.

En San Cristóbal de Entreviñas el agua alcanzó el borde un camino de acceso pese a la enorme pendiente y la distancia desde el curso normal. Arrancó mobiliario (mesas); destruyó algunas nuevas plantaciones de chopos; machacó al menos tres caminos que han tenido que ser rellenados de grava para facilitar su uso; y derribo varios tramos de acequias en diferentes ramales, arrastrándolas a metros de distancia.

La reunión esta prevista a las doce del mediodía y la intención de los regantes pasa por conocer el alcance de los daños en infraestructuras, que a priori parecen cuantiosos. La fuerza del Esla al desmandarse ha desmontado y apeado acequias y causados roturas y grietas en algunos canales. Poner en común todos lo daños y estimar el coste de la reparación o de la sustitución parece ser el objetivo principal de este encuentro al que sucederá una petición de ayuda a la Confederación Hidrográfica del Duero.

Las riadas han echado a perder la mayoría de las cosechas de remolacha y maíz, y los sindicatos agrarios ya advirtieron en los primeros días de la inundación que sería difícil entrar a las fincas hasta el mes de febrero. Parece que este pronóstico se está cumpliendo, agravado además por los daños en las infraestructuras. La comunidad está inmersa en la transformación del regadío y la implantación del riego por aspersión previa concentración de parcelas. En algunos puntos las inversiones en este sistema habrían sufrido daños por las inundaciones, que también han causado daños severos en las infraestructuras de Bretó de la Ribera. Los municipios de la comarca que pertenecen a la Comunidad de Regantes del Esla son Matilla de Arzón, San Cristóbal, Benavente, Castrogonzalo y Villanueva de Azoague.