La sala número 4 del Tribunal Superior de Justicia de la ciudad alemana de Hamm, en Renania del Norte, tiene al zamorano Celso López Ramos como nuevo presidente, un puesto al que se llega por la calidad del trabajo. «Cuando queda una plaza libre se puede optar por candidatura y es el presidente del Tribunal Superior de Justicia quien califica la calidad del trabajo de los aspirantes y realiza un informe. En última instancia, es el ministro de Justicia quien otorga este puesto, después de haber consultado también con asociaciones judiciales», explica el zamorano, natural de Fermoselle.

Todo un éxito profesional que le llega después de un currículo bien labrado y que espera, a sus 54 años, sea el «último paso» de su carrera profesional. En el distrito del Tribunal Superior de Justicia de Hamm viven alrededor de nueve millones de habitantes y a él están adscritos diez audiencias provinciales y 78 juzgados de primera instancia. «Ahora me quedan, hasta mi jubilación, trece años como presidente», calcula el zamorano.

López Ramos emigró a Alemania con un uno de sus hermanos cuando solo tenía nueve años, para reunirse con sus padres y el resto de la familia. Aunque reconoce que adaptarse al país y al idioma «fue duro», se instaló allí definitivamente y cursó sus estudios de Derecho en la Universidad de Müsnter, trabajando después como funcionario del Estado y abogado. Obtuvo la nacionalidad alemana en 1993 y actualmente reside en la ciudad de Lippstadt.