Zamora se situó ese mes con una media de 3.340 afiliados, lo que supone un incremento de 157, el 4,9% más que el mes anterior. Burgos fue la única provincia, junto con Zamora, donde creció este parámetro, aunque ciertamente de forma más discreta, tan sólo un 0,6%. En el resto de las provincias la afiliación de extranjeros bajó, en algunos casos como en Ávila y León de forma considerable (un 7,5 y un 6,3 por ciento), lo que provocó asimismo un descenso de la media regional en un 2,3 por ciento. La caída en Castilla y León fue ligeramente superior a la experimentada en el conjunto nacional, que fue del 1,7%.

Los hombres suponen un 58%, frente al 42% de mujeres. Los no comunitarios superan ligeramente a los procedentes de Europa.