La copia fundida en bronce del grupo escultórico "Nerón y Séneca" del escultor zamorano Eduardo Barrón fue inaugurada el pasado viernes en una céntrica plaza de la capital cordobesa después de que el Ayuntamiento andaluz financiara una réplica de la original de escayola presupuestada en 400.000 euros.
Se cumple así uno de los sueños tanto del propio artista como de sus descendientes, que piden «encarecidamente» al Ayuntamiento de Zamora y a las entidades culturales y financieras que hagan «todos los esfuerzos posibles» para que la capital, siguiendo los pasos de Córdoba, pueda disfrutar también de una de las mejores esculturas del principios del siglo XX.
Al acto inaugural asistieron la alcaldesa de la ciudad cordobesa, Rosa Aguilar; dos de los nietos del artista, Eduardo y Concepción Barrón; y su sobrino, Alejandro Belaustegui. Este último augura que la escultura se convertirá en Córdoba en «un icono cultural, tal y como tendría que ocurrir en Zamora por motivos mayores», expresa el familiar.
El interés de la anterior Corporación municipal de Zamora por obtener una copia utilizando el molde costeado por Córdoba se ha quedado hasta el momento en un proyecto por cumplir. No obstante, el concejal de Cultura saliente en el Consistorio de la capital, José Luis González de Prada -que también formará parte del equipo de Gobierno de la actual alcaldesa- ha mostrado en todo momento gran interés en reproducir una copia en bronce y «ubicarla en un lugar de la capital importante». Tanto los descendientes del artista como la directora del Museo Provincial, Rosario García, ya han mostrado en varias ocasiones su interés en instalar la obra de arte en el entorno de la plaza de Santa Lucía. El familiar de Barrón opina que «no se puede repetir el error cometido con Viriato, que apenas se observa entre todo el arbolado».
El deseo de la familia del escultor es que los zamoranos reconozcan la labor del escultor ya que «si lo han hecho en Córdoba, cuánta más razón de hacerlo en su propia tierra», demanda. El interés de la ciudad andaluza en contar con este grupo escultórico se debe a las raíces del pensador, nacido en Córdoba.
La pieza se digitalizó para tomar un modelo en tres dimensiones utilizando el escaneado a través de esta tecnología. Un sistema «muy novedoso», según asegura Alvaro Menor, responsable de Fademesa, la empresa de fundición de artesanía del metal que ha ejecutado los trabajos durante el último año y medio.
El proyecto parte de una figura tridimensional de gran perfección a partir de la cual se elaboró un modelo en resina, igual al original, que fue utilizado como molde para el proceso de fundición en bronce negro, «ya que está pensada para elaborarse en este material». Previamente, fue necesario ensamblar las piezas mediante soldadura.
La pieza se encuentra ubicada en la actualidad sobre un pedestal de piedra que ha costado 18.000 euros. Además, contará con una iluminación especial.
Fuentes del Ayuntamiento de Córdoba han anunciado su intención de presentar este vaciado en bronce a un concurso en Venecia por la novedad en la técnica empleada. Se trata de la utilización de rayo láser que ha permitido ejecutar el proceso sin afectar a la obra original, en escayola, que se encuentra en proceso de restauración para una próxima exposición en el museo del Prado, propietario de la escultura.
Tanto los familiares del escultor de Moraleja del Vino como las autoridades municipales cordobesas han dejado abierta la posibilidad de crear una exposición itinerante de las obras del artista zamorano. Una muestra en la que, además, se mostraría la técnica y el proceso tecnológico por el que se ha creado este vaciado en bronce. Esta exhibición recopilaría todas las obras que el escultor tiene repartidas por el país, en especial, en el Museo de Zamora.
La escultura está formada por dos monumentales Nerón y Séneca en postura dialogante y transmite las enseñanzas que el filósofo cordobés intenta impartir al joven Nerón, que aparece cubierto con una túnica y con el adorno en el cuello de los jóvenes patricios. Barrón murió a los 53 años, el día 23 de noviembre de 1911.
