El Zamora CF supera cada semana nuevos retos y en este mediodía logró un nuevo triunfo en casa de la Cebrereña que, a pesar de estar en descenso, puso en verdaderos apuros a un líder que sufrió, muy y mucho, para sumar los tres puntos en juego (2-4).
Ya avisó el míster rojiblanco horas antes del encuentro que iba a ser un compromiso difícil en un campo especialmente complicado y es que, hasta este martes, la Cebrereña no había perdido en su casa.
Para este compromiso hubo cambios en el once inicial del líder tanto en el centro del campo, donde Balta alineó a Andoni Andrés y Juanan (que volvió a vestirse de corto dos meses y medio después) y Nata hizo pareja con Rubén Moreno.
Comenzó el partido y el Zamora CF no tardó en ponerse por delante y fue Juanan, que volvía a vestirse de corto dos meses y medio después, quien vio portería al enganchar un rechace del meta tras un córner.
Sin embargo, y aunque podía parecer que lo más difícil estaba hecho, la Cebrereña tiró hacia arriba y puso en verdaderos apuros a la defensa y al portero zamorano hasta que Gustavo Terleira, viejo conocido del Villaralbo donde militó y que lideró el ataque de los suyos, aprovechó una gran falta a favor para poner las tablas.
Con el empate fueron los abulenses los que estuvieron más cómodos ante un Zamora CF al que le costaba adaptarse al terreno de juego, algo que también predijo el entrenador.
De hecho fueron los locales los que tuvieron la oportunidad de irse por delante al descanso pero los planteles enfilaron vestuarios con un provisional empate.
En la reanudación el Zamora CF quiso tirar de galones y Manu Moreira dio muestra de ello al volver a desequilibrar el encuentro con un buen gol en el 49 que fue el 1-2.
Enfrente al Cebrereña fue a por todas y Miguel tuvo que emplearse a fondo para rechazar las embestidas locales que fueron múltiples.
Los minutos corrían a favor de los zamoranos que buscaban la sentencia con sufrimiento y, por fin, en un nuevo saque de esquina llegó el tercer gol rojiblanco, obra de Aarón Aguado, que se estrenó como goleador.
A pesar del 1-3 el encuentro no permitía relajaciones y menos para Miguel que tuvo mucho trabajo bajo los palos y es que los abulenses no se rendían y en la recta final consiguieron el 2-3 en unos últimos minutos de infarto.
El miedo se empezó a apoderar de los zamoranos pero, afortunadamente, Nata volvió a ampliar distancias cuando se cumplía el minuto 90. Quedaba aguantar el añadido, como así se hizo, en uno de los encuentros más difíciles vividos hasta ahora pero que permite al Zamora CF seguir líder y no ceder ni un solo punto.
