Fomentar la cultura y la formación sobre el mundo del vino. Con este objetivo, la empresa de enoturismo «El sabor del vintage» ha celebrado una nueva cata-maridaje en su sede, la antigua panera de la iglesia de San Juan de Morales de Toro, en la que los protagonistas han sido los vinos elaborados por una de las bodegas amparadas por la Denominación de Origen Toro, Bodegas Torreduero, y la carne de ternera de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) de Ávila. Más de medio centenar de personas asistieron a esta nueva jornada gastronómica en la que la directora técnica de la IGP Ternera de Ávila, Mar González, fue la encargada de explicar las características propias de este tipo de carne. Así, durante su disertación, González resaltó que la ternera abulense procede de la raza Avileña-Negra Ibérica y que el sistema de producción utilizado es el de régimen extensivo y trashumante. Asimismo, destacó que la carne procedente de estos animales, y que fue la base de los distintos platos degustados en esta jornada gastronómica, se caracteriza porque presenta una consistencia diferente, es firme al tacto, ligeramente húmeda y de textura fina. Del mismo modo, subrayó que la ternera de Ávila es de color rojo brillante, mientras que la grasa es blanca o color crema y que se caracteriza por su intenso sabor. Durante su explicación, la directora técnica también remarcó que la ternera abulense se sacrifica con una edad no superior a un año, después de haber permanecido con la madre al menos cinco meses, aunque también se incluyen dentro del sello de calidad el añojo destetado con cinco meses, que es sacrificado entre los 12 y los 24 meses, y el novillo que es despiezado cuando tiene una edad que oscila entre los 24 y los 48 meses.

En esta jornada gastronómica también participó Felipe Nalda, director técnico de Bodegas Torreduero, industria afincada en la Denominación de Origen Toro desde hace más de una década y que recoge una producción superior al millón de kilos de uva de las variedades verdejo, garnacha y Tinta de Toro y que, en la actualidad, es la mayor productora de vino blanco monovarietal verdejo de la zona, además de la principal proveedora de vinos de Toro a «El Corte Inglés» y que se comercializan bajo la marca «Quinta el refugio». De la mano de Nalda, los participantes pudieron probar los vinos «en rama» de la nueva añada del 2013, tales como un blanco verdejo con aromas de cítricos, piña y tropicales o un rosado de corte moderno cargado de frescura de golosina de frutos rojos. Después de una cata ascendente con los tintos «Peñamonte Roble y «Marqués de Peñamonte» en las categorías de roble y crianza, los aficionados que se dieron cita en Morales de Toro, también pudieron degustar los vinos de alta gama de la bodega denominados «Colección privada». El promotor de esta jornada gastronómica, Carlos Gallego, realizó un balance positivo, por cuanto «el vino de Toro y la carne de Ávila marcaron un compás perfecto». La jornada fue amenizada con música tradicional del duo toresano, «Pedro y Miguel».