El Ayuntamiento de Toro ha cedido a la Junta Agropecuaria Local un aula en el colegio Magdalena Ulloa a la que trasladará, de forma temporal, su sede. El presidente del órgano agropecuario, Bernardo Caballero, confirmó que el Ayuntamiento se ha comprometido a atender esta petición por el notable deterioro que afecta al edificio que, en la actualidad, alberga la sede de esta entidad. Este compromiso fue asumido por el alcalde, Jesús Sedano, en una reunión mantenida recientemente con los responsables de este órgano. Matizó Caballero que la cesión de este local será «temporal» hasta que la Junta Agropecuaria Local pueda poner en marcha el proyecto de restauración del inmueble de su propiedad, ubicado en la Plaza Mayor de la ciudad. En cuanto al traslado de la sede, reconoció que «vamos a empezar ya» aunque el traslado afectará no sólo a los servicios que la Junta Agropecuaria Local ofrece a agricultores de la zona, sino que también, como recordó, el inmueble de la antigua Cámara Agraria alberga la oficina de la comunidad de regantes del canal de San José. En este punto, Caballero anunció que, una vez que se haya realizado el traslado de todos los servicios será comunicado a todos los ciudadanos para que se dirijan a las nuevas dependencias, en el colegio Magdalena Ulloa.

Por otra parte, el presidente de la Junta Agropecuaria Local justificó este traslado de sede en el «deterioro» del edificio que alberga la sede de la entidad y que, la nueva Junta Directiva, pretende restaurar. De hecho, según Caballero, está previsto elaborar una nueva memoria del edificio para definir el objetivo de este proyecto y analizar, con detenimiento, su estado de conservación. «La idea está todavía un poco verde», reconoció Caballero aunque la Junta Agropecuaria Local tratará de recabar ayudas de distintas Administraciones para poder ejecutar este proyecto de rehabilitación del edificio. Ya la anterior Junta Directiva trató de impulsar esta intervención e incluso llegó a alcanzar acuerdos de desalojo con los inquilinos de los locales ubicados en la planta baja del inmueble. Sin embargo, la paralización del sector de la construcción impidió llevar a cabo el proyecto de rehabilitación integral de la sede, por la falta de interés de los promotores con los que el órgano agropecuario pretendía alcanzar posibles acuerdos. En el año 2004, la Junta Agropecuaria Local llegó a presentar en el Ayuntamiento de Toro el expediente de ruina del edificio ya que, según los estudios realizados, presenta un notable deterioro, además de contar con una deficiente distribución del espacio, lo que dificulta su aprovechamiento.