Una vez pasadas las fiestas, con la templanza y frialdad que el tiempo da, me disponía a hacer un balance de las mismas, pero he decidido no hacerlo, sino mirar al futuro.

Todos sabemos lo que ha pasado, todos sabemos quienes se empeñan, una y otra vez, en cargarse aquello que debemos proteger, puesto que nuestros espantes son únicos y todos debemos arrimar el hombro para conseguir que el legado que nuestros antepasados nos ha dejado no caiga en el abandono, en el olvido y en la vulgaridad.

Si realmente queremos unos espantes y una subida en condiciones, lo primero que hay que hacer es preservarlo. Para ello, disponemos de dos "figuras de protección" que el grupo socialista en el Ayuntamiento lleva intentando conseguir en el actual mandato y que el equipo de gobierno del PP se empeña en no reclamar a la Junta de Castilla y León.

La primera figura es el reconocimiento como Festejo Taurino Tradicional. Se intentó en su día, incluso un grupo de trabajo elaboró unas ordenanzas municipales que se aprobaron el Consistorio y, por lo tanto, deberían estar vigentes. Sin embargo, el propio Ayuntamiento incumple sistemáticamente tales normas. Y, por si eso fuera poco, aunque desde el Consistorio se mandó todo el expediente a la Junta de Castilla y León, cuando esta Administración solicitó más documentación, no se facilitó. De ese modo, se perdió la oportunidad, puesto que actualmente el Ayuntamiento se niega a volver a pedirla. La otra "figura de protección" es la declaración de los espantes y la subida como Festejo de Interés Turístico Regional. ¿Alguien duda sobre la cantidad de gente que viene a Fuentesaúco a disfrutar de lo que debería ser un espectáculo único? ¿No sabe el equipo de Gobierno que con ese reconocimiento se podría acceder a ayudas y a subvenciones para intentar mejorar ambas manifestaciones taurinas? Bien, pues los concejales del PP no creen en ello, no se plantean ni la mera posibilidad de reclamarlo. Cuando los ediles del grupo del PSOE lo hemos propuesto en el pleno, ni han querido debatirlo.

Además, hay que plantearse otras cuestiones, como es la colaboración de todos, otorgar participación a los saucanos para que no sean unos pocos, y siempre los mismos, los que se encargan de organizar los espantes y la subida. Hay que contar con todos los que hacen posible estas ancestrales costumbres: espantadores y caballistas. Es imprescindible unificar posturas, normativa; ver qué tipos de toros, qué caballistas contratar, cómo hacer el contrato, valorando toro subido/toro cobrado. Es necesario respetar el espacio de los caballistas y de los espantadores, haciéndoles saber lo importantes que son todos en este festejo.

Se debe hacer una comisión de fiestas en condiciones, que represente a todos los sectores, a espantadores, a caballistas, a las Peñas... Y a los que, desde su conocimiento del mundo taurino, puedan aportar ese saber que actualmente no se toma en consideración.

Lo que tenemos que tener claro es que una semana antes de las fiestas, no se puede reunir a las peñas para decirles que vayan a los festejos de pago a la plaza de Toro, hay que trabajar todo el año, para que sean los festejos que todos deseamos que sean.

A los concejales del PP, porque son los que mandan, a estos es a los que hay que reclamar que se dé respuesta a estas peticiones. Y recriminar que estén interesados en traer a cargos del PP e invitarlos a vinitos y pinchos en único bar, sin tener consideración hacia los demás bares, sin importarles lo que son los espantes y la subida, que siguen sin proteger como merece el gran legado cultural que son.