Presumir de bien nacidos sin ser agradecidos es tarea vana. Por eso es de agradecer, y mucho, que desde la toma de posesión del cargo de jefe del Mando de Ingenieros, en el año 2012, don Manuel Godoy Malvar, general comandante militar de Salamanca y Zamora, tenga hacia nuestra ciudad y provincia y hacia sus ciudadanos deferencias, más allá de su cargo, que no pueden ni deben pasar desapercibidas a los ojos de la sociedad zamorana. Sobre todo de aquellos que valoramos el papel que desempeñan las Fuerzas Armadas españolas en España y en el extranjero, allá donde han cooperado y cooperan para instaurar la paz perdida, allá donde la misión encomendada es más necesaria y eficaz, máxime tratándose de quienes están adscritos a la especialidad de ingenieros.

Desde que tomara posesión de su cargo, el general Godoy no ha faltado a ninguna cita con las tradiciones, fiestas, eventos y costumbres de Zamora. Ha logrado sacar tiempo de donde no lo tenía para algo más que cumplir con los zamoranos. Y cuando se ha precisado su permiso para que la Banda de Guerra del Regimiento de Especialidades de Ingenieros n.º 11 se desplazara a Zamora para ilustrar con su música un concierto, los zamoranos amantes de la música militar, que somos mayoría, hemos podido disfrutar de los acordes de marchas y piezas inolvidables, cuántas de ellas con el público puesto en pie y cantando o coreando las notas procedentes de los instrumentos que con verdadero virtuosismo tocan los hombres y mujeres que forman la conocida y querida Banda de Guerra de Salamanca.

La Orden Ministerial 240/2001 del Calendario de Festividades de las Fuerzas Armadas determina que el 2 de noviembre se celebre el día de los caídos por la patria, de todos los caídos sin distinción, este año la celebración, que tiene lugar en la zona de panteones militares y que con tanta brillantez prepara el Cuartel General del Mando de Ingenieros, se celebró en el camposanto de San Atilano el pasado día 30. Y una vez más, los deudos de cuantos allí duermen el sueño eterno y que se contaban por cientos, debido a la proximidad del Día de Todos los Santos, volvieron a arremolinarse en las inmediaciones de la extensa parcela del camposanto zamorano, sin complejos, emocionados, sintiendo y viviendo el acto, desde las palabras del general Godoy que a nadie dejan indiferentes y el responso del joven capellán hasta el toque de oración a cargo de la banda del Regimiento, pasando por la colocación de una corona de flores que de manos de don Manuel Godoy y del subdelegado del Gobierno en Zamora, Jerónimo García Bermejo, se deposita en homenaje y recuerdo de los caídos.

Un acto precioso, como todos los años, que cuenta con presencias civiles y militares y la gratitud, el recuerdo emocionado y el aplauso de cuantos llevamos en los adentros a las Fuerzas Armadas españolas.