La famosa "Agua, azucarillos y aguardiente", pero también "Los sobrinos del capitán Grant" o "Marina" fueron algunas de las zarzuelas que se pudieron escuchar ayer en el patio del Seminario San Atilano, escenario de uno de los primeros homenajes que el maestro Miguel Ramos Carrión recibirá en su ciudad natal con motivo del centenario de su muerte.

Bajo el título "Gracias don Miguel", la asociación zamorana Amigos de la Ópera convirtió el espectáculo de zarzuela que cada año suele organizar con motivo de las fiestas patronales de la capital en un reconocimiento a la figura de un zamorano ilustre "poco conocido", según reconoció el barítono Luis Santana. Precisamente él fue uno de los protagonistas de esta gala. "Siempre es un orgullo poder cantar en mi casa", subrayaba poco antes de subirse al escenario.

Amplio elenco de artistas

Junto a él, completó el elenco de artistas el concertista de castañuelas Carlos Granados y la soprano Amanecer Sierra, a los que acompañó una nutrida representación, con 60 intérpretes, del Coro Filarmonía de Madrid y también de la propia asociación de Amigos de la Ópera. Un espectáculo con estrada gratuita cuya dirección musical recae en el maestro Pascual Osa, conocido por el gran público gracias a su participación en el programa de música "El Conciertazo", donde ejercía de director de orquesta.

Los asistentes no solo pudieron disfrutar de las obras del maestro zamorano, sino también de otros títulos de la zarzuela española que de alguna manera tienen relación con Ramos Carrión.

"Lo ideal es que este espectáculo se hubiera estrenada en el teatro que lleva su nombre", confesó Santana, aunque también apuntó que "ya habrá más ocasiones", puesto que la asociación Amigos de la Ópera está preparando un completo programa de actividades, entre las que figuran conferencias y conciertos, para ensalzar la figura del compositor, quien fue el primer presidente de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE).