-¿Se da por bueno este empate sin goles?

-Considero que siempre es mejor empatar que perder como nos ocurrió en Eibar que tuvimos cerca hasta la victoria. Este 0-0 no me sabe mal aunque quería ganar. Creo que defensivamente no hemos tenido muchos problemas y lo hicimos bien, pero ofensivamente sigo insistiendo que tenemos que hacer más. Al final no me sabe mal este empate.

-¿Por qué no se ha hecho más en ataque, por méritos del rival o por deméritos del Zamora?

-El rival tiene orden en el campo, no se rompe tan fácilmente y si es uno el que se rompe, pues entonces no habría nada que hacer. Quizá hubo una parte en el segundo tiempo que parecía que el Caudal estaba más estirado y nosotros buscábamos más la posesión del balón pero rápidamente el rival se reorganizó. Nosotros lo intentamos al contragolpe y también tocando mucho el balón, pero hasta la medida que el contrario nos permitía porque se armaba muy bien ya que no es un equipo que se estira fácilmente. A nosotros nos falta dar más en ataque pero también por culpa del rival tampoco pudimos hacer más.

-Las dos claras ocasiones que tuvo el Zamora llegaron de la misma manera, a balón parado y en sendos cabezazos de Jeffrey.

-Fue una pena que no entrase alguna de ellas porque fueron situaciones muy claras que nos podrían haber permitido ponernos con ventaja en el marcador y que el rival se tuviese que abrir más. No se metieron pero lo importante es que el Caudal tampoco fue capaz de hacernos un gol. Desde luego, no hubiese estado nada mal haber empezado el encuentro con ese gol que pudo haber marcado Jeffrey.

-En los últimos minutos el Caudal achuchó un poco más. ¿Se le acabó al equipo la gasolina como ocurrió en Eibar?

-A lo largo de la semana estuvimos hablando que no se nos tenían que hacer demasiado largos los partidos como así nos ocurrió ante el Eibar. También había que entender que en esta ocasión tenía más posibilidades de cambio por delante y eso permite que los de arriba estuviesen más frescos para que no nos superasen tan fácilmente. No obstante, en los instantes finales sí que teníamos algunas secuelas de cansancio y de retroceder más de lo debido. Al final de los partidos nos falta un poco porque el Caudal seguía achuchando con dos puntas claros a los que rápidamente intentaba meter el balón. Tenemos que mantenernos más firmes y que cuando tengamos el balón, no nos lo tenemos que quitar de encima tan rápido para ganar oxígeno en esa parte final.

-¿En el mes que Aguirre lleva en el Zamora, ha notado mejoría en el equipo?

-Sí, en cuanto a lo que es estar armado. No me gusta los equipos estirados porque parece que estás jugando al azar. Necesito, para mi tranquilidad, que el equipo esté armado, junto y que sus líneas estén marcadas. Al final del partido y en el vestuario los jugadores transmitían seguridad. No hemos recibido ocasiones de gol por parte del contrario y esto le da mucha seguridad al futbolista, luego hay que apuntalar un poco más el ataque.

-¿A qué se debió el cambio de Adrián?

-Estaba viendo que le estaba costando engancharse al partido, no se encontraba bien y pensé hacer el cambio incluso antes.