La pastorada alistana de Nochebuena tiene como protagonista a una cordera, conocida como "cancina", ofrecida por alguna familia de pastores en acción de gracias por algún favor recibido. La cordera pasaba en la mañana de Navidad a formar parte del "ganado de la Virgen", cuyos corderos y lana eran vendidos para cubrir los gastos de la parroquia. La cordera "sagrada" era tan respetada por pastores y vecinos que hasta ser madre, si entraba en un acotado o cortina se le dejaba allí pastar. En algunos pueblos no se podía sacrificar y "morían de viejas".