La antigua casa del médico de Morales del Vino, de propiedad municipal, ha sido cedida por el Ayuntamiento para el realojo de una familia de origen marroquí que se encuentra en paro y en riesgo de exclusión social.

El chalé, que usaba el médico en verano, ya fue desalojado hace un año cuando la idea de la Corporación Municipal que presidía José María Barrios consistía en llevar ahí el puesto de la Guardia Civil de Moraleja del Vino, debido a las malas condiciones de ese acuartelamiento.

Sin embargo, la casa, que tenía el visto bueno de la Subdelegación y de la propia Guardia Civil, nunca se llegó a utilizar para ese fin, debido a las protestas de los pueblos afectados, que hicieron ver a las autoridades la incongruencia de situar el cuartel en un pueblo que está fuera de la demarcación del puesto de la Guardia Civil de Moraleja.

Ahora estas dependencias, equipadas y amuebladas, ya que el Ayuntamiento compensó al médico para quedarse con el mobiliario, han sido ocupadas por esta familia. La idea es que la familia se quede temporalmente hasta que mejore su situación laboral y económica.

Medidas sociales

Asimismo el Ayuntamiento ha buscado ubicación provisional en otro piso situado en el bloque de viviendas junto a las escuelas a una madre y su hija por un tiempo prudencial, hasta que encuentren otra casa.

El realojamiento es una de las primeras medidas sociales que ha llevado a cabo la nueva corporación de Morales del Vino, formada por Ciudadanos y la Agrupación Vecinal Independiente que gobiernan el municipio merced a la coalición rubricada entre ambas formaciones y el edil del PSOE.