Coreses recreó ayer por las calles del municipio una Pasión viviente que congregó a cientos de visitantes aprovechando la excelente climatología. Un grupo de cuarenta actores principales y secundarios arropados por una gran cantidad de figurantes dieron color y realismo a la representación. En el grupo de actores principales destacó el papel de Jesús que fue encarnado por el joven coresino Hugo Álvarez, quien ya ha realizado este papel en otras ocasiones. La localidad quiso también rendir un homenaje al imaginero Ramón Alvarez, hijo predilecto del municipio, con un montaje audiovisual en el salón socio-cultural de La Arena, sin embargo, este no se pudo llevar a cabo por problemas técnicos.