Vecinos de Villanueva de Valrojo y automovilistas de la carretera a Villardeciervos contemplaron durante dos días cómo una bandada de buitres se cebaban en el cadáver de un ciervo a unos 50 metros de la carretera, a unos 800 del casco urbano y en una zona de tránsito de ganados y personas. El animal se encontraba en el interior de una finca conocida como el corral de la Tía Victoriana y aparentemente la causa de la muerte puede ser la misma que en el otro caso detectado también en Villanueva y que apunta a la pasteurelosis. Era una hembra joven, aunque parece ser que la mayoría de los animales afectados son machos jóvenes.

Tras esos dos días de espera a que el servicio Territorial de Medio Ambiente procediera a su recogida, los miembros de la Asociación en Defensa de Sanabria y Carballeda comunicaron a las nueve menos veinte del viernes ante los agentes del puesto de la Guardia Civil de Villardeciervos la situación del cadáver para que trasladaran la gestión a los agentes medioambientales. A los pocos minutos de formular la notificación agentes de la Guardia Civil y de la Guardería de la Reserva procedían a inspeccionar la zona señalada.

José Luis Baladrón Ferrero criticaba que prácticamente todos vecinos de la zona eran conocedores de la presencia del cadáver, incluida la Guardería Medio Ambiental de la zona de la Reserva «¿Por qué no lo ve el profesional y no ha procedido retirarlo». Desde la asociación subrayan que hasta que se determine el origen de la enfermedad se debe establecer un área de control y medidas preventivas hasta que se determine el origen de la mortandad, de acuerdo a la Ley de Sanidad Animal que comprende también la fauna silvestre.

El portavoz de la asociación, José Rodríguez Ballesteros precisó además que todo ciudadano tiene la obligación de comunicar la presencia de animales muertos o enfermos, además de su sacrifico de los animales enfermos o sospechosos, y la destrucción de los cadáveres en determinados casos. José Rodríguez recalcó que han transcurrido más de dos semanas desde que se denunció públicamente la presencia del primer cuerpo en Villanueva de Valrojo, aunque había constancia desde hace más de un mes de la aparición de los animales en diversos puntos entre los términos de Boya y Villardeciervos. Baladrón reiteró que el primer animal aparecido en el término no se retiró, pese a estar en las inmediaciones de un camino.