San Cristóbal de Entreviñas tendrá que construir un rotonda en la carretera N-630 para permitir el acceso al polígono industrial por esta vía desde el casco urbano. Precisamente este ha sido el escollo más difícil de solventar en todo el proceso administrativo que se viene llevando a cabo para el desarrollo del Plan Parcial de los sectores SAUs 3A y 3B que viene promoviendo el Ayuntamiento.

Los técnicos de Fomento sopesaron con el Consistorio las posibles soluciones para dar entrada al polígono desde León, ya que en sentido desde Benavente no causa problema alguno a la circulación. La construcción de una rotonda partida o media rotonda dio por fin la solucción a una amplia rotonda frente a la futura zona industrial que ya cuenta con un acceso hasta la carretera en paralelo con el caño de desagüe y donde se han llevado a cabo hasta primeros de este año las obras de su encauzamiento y de entubado de la acequia de riego, canalizaciones soterradas para conducciones de cableados y el propio vial con una rotonda donde converge el camino que discurre en paralelo con la carretera y para el que ahora la Diputación tiene en fase de licitación.

Tras la declaración de Impacto Ambiental publicada en el Bocyl, ya sólo resta porque la Comisión de Urbanismo conceda el visto bueno. Desde ahí se iniciará el proceso urbanístico en las parcelas a la vez que se tendrá que construir una estación eléctrica. La anunciada ampliación del grupo farmacéutico Gadea servirá de atractivo para potenciales construcciones de naves industriales, explicaba ayer la alcadesa Leonor González quien se siente "esperanzada" de ver implantadas industrias en la zona una vez desarrollado el polígono.

El Ayuntamiento de San Cristóbal como promotor del polígono industrial dispone de un plazo de cinco años para desarrollar el área industrial ya que este es el tiempo de vigencia de la declaración de impacto ambiental ahora aprobada.

El Plan Parcial tiene por objeto establecer la ordenación detallada de los Sectores SAUs 3A y 3B, clasificados como suelo industrial por las Normas Subsidiarias de San Cristóbal de Entreviñas. Dichos sectores comprenden las parcelas 9.505 y 9.509 del polígono 501 del término municipal de San Cristóbal de Entreviñas, tienen una superficie total de 294.125,69 m2 y un uso actual agrícola e industrial.

Se localiza al suroeste del núcleo urbano, a 1 km de él, y tiene acceso directo desde la carretera N-630 donde se tendrá que construir la rotonda. El municipio cuenta con otro polígono industrial actualmente saturado de empresas.

El uso principal proyectado es el lucrativo en su categoría de industrial en todas sus modalidades, excluyendo la agrícola y la ganadera. El desarrollo se prevé en 3 unidades de actuación. El futuro polígono industrial se encuentra atravesado por el desagüe n.º 18 de la Zona Regable del Canal del Esla, también denominado arroyo o acequia de Santa Marina. El abastecimiento de agua se realizará desde la red municipal conectando con el depósito existente en el actual polígono. El Estudio de Impacto Ambiental justifica que las necesidades hídricas se verán cubiertas con el suministro actual de la red municipal.