La mayoría del PP permitió al equipo de gobierno aprobar el convenio con el Centro de Transportes para que este pague la organización de las ferias locales, asunto en el que la oposición se abstuvo temiendo que el reparto de dividendos y el coste de estas ferias pueda mermar sus ingresos e incluso «descapitalizar» la sociedad, y también modificar la ordenanza de terrazas. UPL, IU y PSOE argumentaron que ampliar el horario de las terrazas, con el que se mostraron de acuerdo, colisionará sin embargo con el descanso de los vecinos y recordaron que la ordenanza fiscal sobre ruidos fija tasas para los vecinos que denuncien por segunda vez a un local sin que la denuncia quede constatada al realizar la medición. A juicio de la oposición, que pidió que el asunto quedara sobre la mesa para debatir el asunto en profundidad (IU) o que se modificase la ordenanza fiscal para que las denuncias resultasen gratuitas en caso de equivocación para los vecinos, de esta manera se coacciona a los ciudadanos impeliéndoles a no denunciar. La edil de Urbanismo, Meri Martínez, recordó que una ordenanza no tenía que ver con la otra y afeó a las tres portavoces su postura de «nadar y guardar la ropa» porque «así no contentarán ni a unos ni a otros, aunque siempre podrán decir que se han abstenido si la modificación sale bien». Martínez aseguró que en caso de que la colisión de intereses argumentada por la oposición se produce y los ruidos imperan sobre el descanso «volveré a dejar la ordenanza como estaba y pediré disculpas».