La "Casa de Papel" zamorana: la Fábrica de Moneda "pierde" material sensible de pasaportes y DNI

Un repartidor de paquetería admite que se quedó el pedido, pero sin saber que contuviera elementos para expedir documentos oficiales

Máquina para expir los DNI y los pasaportes en la Comisaría de Zamora.

Máquina para expir los DNI y los pasaportes en la Comisaría de Zamora. / E. T. (Archivo)

Zamora tiene su particular "casa de papel" en Benavente, donde la Fábrica de Moneda y Timbre perdió la pista a un paquete que llevaba otro destino. ¿Dónde está el contenido de ese envío? Tres años y medio después su paradero continúa siendo una incógnita que el acusado de hacerlo desaparecer, el empleado de la empresa de paquetería, no ha despejado.

No niega que el envío nunca llegó a Logroño porque él se lo quedó. Lo que no admite este repartidor zamorano es que se apropiara de la mercancía del Estado con fines ilegales, como podría ser falsificar DNI y pasaportes o comerciar con los documentos en blanco. No obstante, la Fiscalía y el Abogado del Estado consideran que su conducta delictiva está más que clara. "Actuó con ánimo de lucro", sostienen en sus escritos de acusación en los que exigen cárcel para el zamorano que trabajaba en la plataforma logística de la empresa que le subcontrató en Benavente.

Lo cierto, sin embargo, es que nunca se han recuperado todos esos "materiales sensibles" que se utilizan en las comisarías de policía para dar "servicios de interés general como la emisión de los DNI y pasaportes oficiales españoles, que afectan a la seguridad nacional", con cuyo albarán se quedó también, de acuerdo con el escrito de acusación de la Fiscalía de Zamora.

El delito de hurto que reconoce haber cometido el 22 de agosto de 2020 de madrugada está agravado por las funciones y características de esos documentos, por eso podría llevar a la cárcel al empleado de la empresa de paquetería de iniciales J.A.H.G., al exigir una pena de dos años y ocho por el Ministerio Público, además de indemnizar a la Fábrica de Moneda y Timbre con 1.143 euros en que está valorado el material. El Abogado del Estado, que defiende los intereses de la Fábrica de Moneda y Timbre, solicita las mismas penas.

Sin rastro de lo robado

El paquete contenía una libreta de pruebas de pasaporte, material "especialmente sensible" por los elementos de seguridad de ese documento español que tienen. Además deberían haber llegado a Logroño dos lectores de chip externo; tres cabezas de impresión; un sensor de control de temperatura para laminadora de pasaporte lapis; un rodillo calentador para laminadora lapis; un teclado de laminadora y dos correas de transporte de impresoras de pasaporte.

El imputado habría sustraído el paquete a las 2.24 horas cuando estaba empleado como subcontratado por la empresa Tourline Express y lo hizo "aprovechando" ese puesto de trabajo como repartidor que le permitía el acceso a las mercancías que llegaban de la Fábrica de Moneda y Timbre. Esta facilidad de acceso a los pedidos llevan al Abogado del Estado a solicitar la aplicación de la circunstancia agravante de abuso de confianza. Y es que se le supone una integridad ética como profesional que le impediría apropiarse de los paquetes que llegan a la empresa benaventana para continuar su ruta hacia otras provincias. Esa responsabilidad debió ser máxima con paquetes que contienen mercancías de este tipo, que pueden ser utilizadas con fines delictivos como emitir carnés de identidad o pasaportes falsos.

Las dos acusaciones públicas solicitan en sus esctitos que se declare a la empresa de paquetería la responsabilidad civil en caso de que el imputado no pueda responder con sus bienes.

El procedimiento judicial investigado por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Benavente ha concluido ya y está en fase de apertura de juicio oral, que deberá fijar el Juzgado de lo Penal, al que llegará el asunto para concluir el caso de hurto agravado.

En la vista oral, además del acusado, deberá testificar el representante de la empresa que le subcontrató en su día y los guardias civiles que intervinieron en las pesquisas que conforman las diligencias policiales y que han concluido con la existencia de indicios de que el repartidor cometió el hurto para enriquecerse.

Suscríbete para seguir leyendo