Zamora tiene actualmente la mayor incidencia de casos de coronavirus a catorce días de Castilla y León. Esa es una de las conclusiones que se puede extraer del parte remitido este viernes por la Consejería de Sanidad, que incluye los datos relativos a lo ocurrido en los tres días anteriores en el marco de la pandemia en la comunidad autónoma. La tasa de la provincia se sitúa ahora en 1.763 contagios por cada 100.000 habitantes, 514 puntos por encima de una media regional que supera también el millar y que sigue en tendencia ascendente tras la Semana Santa.

Las propias autoridades han reconocido en los últimos días que ese incremento entraba en los cálculos, aunque el objetivo es que la cifra de contagios no se traduzca en un aumento considerable del número de hospitalizaciones. El reporte del martes invitaba a una cierta preocupación al respecto, ante el repunte detectado en el Complejo Asistencial, pero la información oficial de este viernes revela una estabilización en la lista de ingresos.

Zamora cuenta con un hospitalizado menos por COVID que el pasado martes

De hecho, en estos momentos, Zamora cuenta con un hospitalizado menos por COVID que el pasado martes, y se mantiene con 62 pacientes en planta y otros dos en la Unidad de Cuidados Intensivos. Todo ello, con la sexta planta abierta y parcialmente ocupada ya por enfermos de coronavirus, tras la decisión tomada por Sanidad y confirmada recientemente por la delegada territorial de la Junta en la provincia, Clara San Damián.

Habrá que ver si esa contención en el grado de ocupación de las camas se mantiene en los próximos días, habida cuenta de que los casos siguen al alza. En concreto, en las últimas 72 horas, Zamora reportó 710 contagios, una cifra considerable, especialmente si se tiene en cuenta que ahora resulta más complicado contabilizar todos los positivos. Desde que comenzó la pandemia, se han confirmado 46.173 casos en la provincia, el equivalente a algo más del 27% de la población del territorio.

Bajan los brotes

En cuanto a los brotes, la cifra se redujo sensiblemente, al pasar de 23 a 9 en apenas tres días, aunque este es un indicador que ha ido perdiendo valor con la nueva forma de contabilizar los casos. Lo que sí continúa golpeando sin piedad a la provincia son las muertes por coronavirus. Desde el martes, la provincia ha tenido que lamentar cuatro fallecimientos por COVID en el Complejo Asistencial, lo que eleva la cifra total de decesos por esta causa en las dependencias hospitalarias hasta los 576 desde que comenzó la crisis sanitaria.

En todo caso, para matizar estas cifras, conviene subrayar que el propio consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, quiso aclarar en las últimas horas que un importante porcentaje de los pacientes hospitalizados en Castilla y León con coronavirus ingresaron por una dolencia distinta, por lo que el efecto del COVID se sumó a una patología previa para agravar el estado de salud de los afectados.

Más allá de eso, Vázquez hizo un llamamiento a la prudencia por la “alta transmisibilidad del COVID”, y confirmó que Sanidad tiene capacidad para solventar la situación actual sin necesidad de dejar de atender otras cuestiones. Mientras eso continúe así, resulta difícil pensar en un regreso a medidas más restrictivas, justo cuando está a punto de cumplirse un año del final del último estado de alarma que estuvo en vigor.

La vacunación

Una de las claves para esta nueva convivencia con el virus, alejada de las normativas más lesivas para la libertad de los ciudadanos, tiene que ver con el avance de la vacunación. En Zamora, se han administrado ya más de 400.000 dosis en las distintas tandas para proteger a la población, y la campaña todavía continúa.

De hecho, la Delegación Territorial remitió este viernes una nueva convocatoria para la semana del 2 al 8 de mayo. La actividad se concentrará durante los días 3 y 4 de mayo, cuando se habilitarán horarios para la vacunación con segundas dosis tanto para los mayores como para los menores de 12 años, así como para la dosis de recuerdo en mayores de 18 años. La intención de Sanidad es continuar hasta alcanzar el mayor número de inmunizados que sea posible para que la pandemia se convierta pronto en un mal recuerdo.