La Federación Provincial de Asociaciones Padres de Alumnos de Centros Públicos de Enseñanzas no Universitarias, de Zamora, (FAPA), "ante el vacío de instrucciones firmes por parte de la Administración educativa estatal y regional, que continúan con un discurso abierto, difuso y confuso, cargado de buenas palabras", exige que "no avanzar temario, que se podrá retomar más adelante y de manera presencial; utilizar la evaluación continua establecida en la Ley, valorando el curso sin necesidad de poner una nota al periodo no presencial"; y también "cambiar el currículo del tercer trimestre por un aprendizaje de herramientas que hagan al alumnado más competente, fuera del temario conceptual". Expone, además, que "entender que el papel del profesorado con el alumnado es imprescindible como acompañamiento educativo y emocional, no como elemento de presión para la entrega de tareas", e indica que "especialmente para el alumnado que va a realizar la EBAU, que ésta se realice acorde al temario de los dos primeros trimestres, y se garantice, más que nunca, una prueba equitativa en todas las comunidades autónomas".

FAPA Zamora manifiesta en su comunicado que "las familias entendemos que al igual que en el ámbito de la salud y en el social se han aplicado medidas temporales y extraordinarias, a nivel educativo se debería actuar con el mismo criterio y acorde a la situación del alumnado, sin que nadie se pueda quedar atrás por la excepcionalidad de la situación que vivimos". Advierte, además, que "si la Administración no nos acompaña, garantizando la unidad y equidad de la actual realidad educativa, unidos tomaremos decisiones que garanticen el bienestar de nuestros hijos/as".

La FAPA hace estas consideraciones porque, según apunta, "a las puertas de comenzar un nuevo trimestre, seguimos sin instrucciones sobre qué debe hacer el profesorado, qué debe hacer el alumnado y con qué medios cuentan". Resalta que "las instituciones que tienen la responsabilidad de estructurar, coordinar y fijar los pasos a seguir, no la están asumiendo, dejando a la Comunidad Educativa desorientada y con incertidumbre".La Confederación recuerda "las situaciones extremas familiares en las que se encuentran muchos de nuestros menores ante la enfermedad o muerte de seres queridos, falta de ingresos en casa, falta de espacio y vivencias de violencia doméstica".