Teresa López: "Si las mujeres nos vamos, los pueblos envejecen y desaparecen"

La presidenta de Fademur considera que será una jornada "muy interesante y necesaria" para tratar de avanzar en propuestas que consigan revertir la pérdida de población y el abandono de territorios.

-¿Cómo ve el futuro de la España despoblada?

-Quiero ser razonablemente optimista. Estamos en el momento de apostarr, en primer lugar, porque quienes están se puedan quedar y en el momento también de atraer o conseguir que gente que marchó o que quiere iniciar un proyecto de vida pueda instalarse en una zona rural. Para eso es fundamental garantizar los mismos derechos independientemente de donde vivas y sobre todo, abordar todas las medidas con la perspectiva de género. En Fademur siempre hemos defendido que buena parte del problema al que nos enfrentamos es porque no se han atendido las demandas de las mujeres. Si las mujeres nos vamos de los pueblos, estos se masculinizan, envejecen y desaparecen, con lo cual la prioridad a la hora de enfocar ese futuro es abordar esa mirada con una perspectiva de género que nos permita facilitar que las mujeres nos podamos quedar.

-¿Es importante la presencia de la mujer en los pueblos?

-Es imprescindible porque cuando nos vamos, esos pueblos están condenados a la desaparición, con lo cual generar oportunidades laborales para que las mujeres se puedan quedar o facilitar los emprendimientos, el acceso a la financiación y a la comercialización y que lleguen las nuevas tecnologías con una cobertura suficiente es fundamental. Todas estas demandas que están sobre la mesa necesitan una respuesta ágil para que las mujeres tengan esas oportunidades laborales. Adicionalmente, por supuesto, hay que garantizar el acceso a los servicios. Tenemos que ser capaces de diseñar una fórmula para garantizar que los servicios se prestan independientemente de donde vivas.

-¿Qué falta en el medio rural para que la gente se marche?

-Es esa combinación entre dificultades de acceso a los servicios y falta de oportunidades, que hacen que muchas veces la vida se pone tan complicada que la gente opta por marcharse a las cabeceras de comarca o a las ciudades. Que una familia decida que las circunstancias o la vida es tan complicada que merece la pena mudarse significa que deja de estar en el territorio, de gestionarlo, ocuparlo y mantenerlo vivo, y eso es un lujo que no nos podemos permitir.

-¿Qué se pierde con la despoblación?

-Patrimonio, cultura, conocimiento y una buena parte de nuestro saber acumulado en los últimos siglos, que debería ser parte de nuestro patrimonio a proteger.