Tras una semana de asimilación del gran éxito electoral cosechado, Izquierda Unida tiene por delante ahora la labor de confeccionar un equipo para gobernar la ciudad en solitario. Hasta ahora, Francisco Guarido y los suyos habían liderado la coalición con el PSOE con ocho ediles, por los cuatro con los que contaban los socialistas. A partir del próximo 15 de junio, IU tendrá catorce representantes y deberá repartir las áreas teniendo en cuenta esta nueva realidad.

Por el momento, fuentes de la organización aseguran que el partido se está moviendo sin prisa. La semana pasada apenas hubo movimiento y la situación se empezará a aclarar durante estos días, aunque Francisco Guarido ya dejó clara su intención de mantener a los concejales actuales en sus puestos o, en el caso de introducir algún cambio, mostró su preferencia de que fuese de tono menor.

Las principales dudas, por tanto, radican en la asignación de las áreas de Juventud, Seguridad Ciudadana, Recaudación o Igualdad, que hasta la fecha estaban en manos de Soraya Merino, Antidio Fagúndez, José Carlos Calzada y Adoración Martín respectivamente.

Ese reparto se irá conociendo a medida que avancen los días para descubrir el modelo que escoge Francisco Guarido para gestionar su mayoría absoluta y también su gabinete, pues dos de sus miembros actuales, Concha Rosales y David Viñas, han sido elegidos como concejales.