Los padres de alumnos de centros públicos ha criticado el enfoque de la EBAU (selectividad) y reclamado una prueba única para toda España. Los padres manifiestan su disgusto por el enfoque de segundo de bachillerato, diseñado para pasar este examen en lugar de servir de orientación para los futuros estudios.

"Echamos en falta una adecuada labor de orientación profesional, realizada por profesionales especializados, que instruya al alumnado, tanto en cuanto a la oferta formativa existente, como en cuanto a sus aptitudes y actitudes personales". Piden a los encargados del diseño de las pruebas que se atengan "a criterios reales y coherentes e imponen un número de estándares de aprendizaje muy elevados, derivados de un amplísimo currículum".