Tan cerca físicamente pero tan lejos mentalmente. Con esta barrera imaginaria de sus alumnos entre Zamora y Portugal quiso romper la profesora Isabel María Hernández, del IES Universidad Laboral, a través de un intercambio con estudiantes de la misma edad del instituto Abade de Baçal de Braganza, en el que también colaboraron sus compañeras Mariluz Vaquero y Antonio Matellán.
El inicio de esta propuesta educativa nace de los encuentros celebrados recientemente en Zamora y Mirandela de los Consejos Rayanos promovidos por la Asociación Rionor, cuyo objetivo es movilizar a la ciudadanía y a las administraciones de ambos lados de La Raya "para promover todas las potencialidades de estos territorios con el fin de aumentar la prosperidad de sus habitantes y evitar así el problema de la tremenda despoblación que padecen", resume la profesora.
El tema de las jornadas de este año era, precisamente, "La escuela y el futuro de los territorios rayanos" y a ellas acudieron expertos en educación y desarrollo rural y los máximos mandatarios relacionados con este área, tanto en Castilla y León como en Portugal.
Mientras que la actividad en Zamora se desarrolló en la Fundación Rei Afonso Henriques, la cita portuguesa fue en la Escuela Profesional Agrícola de Carbalhais-Mirandela. "La presencia allí del ministro de Educación de Portugal, Tiago Brandao Rodrigues y del consejero de Educación de la Junta, Fernando Rey, puso de manifiesto la importancia de los temas tratados en estos consejos", valoró Hernández. "Ambos mandatarios coincidieron en el deseo de construir un espacio educativo transfronterizo de cooperación que pueda contribuir a que los jóvenes de ambos lados de la frontera conozcan la realidad de sus países vecinos. Una realidad en la que se comparten los mismos problemas de despoblación, envejecimiento, carencias de infraestructuras y falta de oportunidades para los que se quieren quedar", enumeró la profesora del IES Universidad Laboral, quien, con estas jornadas de convivencia entre el instituto zamorano y brigantino, quiso poner la primera de muchas piedras a favor de ese objetivo.
Convivencia
De esta manera, junto con los profesores del instituto Abade de Baçal, comenzaron a organizar el encuentro entre alumnos. "Todos sentimos la necesidad de implicarse para que el deseo de aproximación y convivencia y los proyectos de cooperación entre las comunidades educativas de ambos países no quedara solo como una buena intención", subraya.
De ahí nació este proyecto de intercambio escolar, con una primera parada en Braganza de la que los alumnos zamoranos regresaron "encantados", según afirma su profesora. "Pensaban que los estudiantes portugueses eran diferentes y se encontraron con jóvenes con sus mismas inquietudes. Además, las instalaciones de su instituto eran magníficas y nos hicieron una gran acogida", agradece Isabel María Hernández.
Un recibimiento con el que también agasajaron los zamoranos a sus compañeros portugueses cuando les devolvieron la visita, explicándoles aspectos sobre sanidad, economía o gastronomía de Zamora y realizando incluso una visita a la explotación ganadera de Pago Los Vivales en Coreses y a la vecina Toro. "Logramos derribar barreras y prejuicios", asegura orgullosa la docente. Y es que este encuentro potenció en todos los estudiantes un conocimiento de "la Europa más cercana" y ayudó a favorecer "el desarrollo de los valores de convivencia, con el respeto por las diferencias y valoración de lo propio. El conocimiento mutuo nos llevó a comprender que podemos aprender mucho unos de otros", añadió.
Por otro lado, "crear lazos de amistad entre los jóvenes españoles y portugueses propiciará la cooperación entre ambos en un futuro y ayudará a que aúnan esfuerzos para transformar los deprimidos territorios hispanoportugueses de la frontera en regiones de oportunidad, como sucede en otras fronteras de la Unión Europea", valora para finalizar.
