El bipartito que gobierna el Ayuntamiento de Zamora abandonará el cargo antes de las elecciones de mayo con un superávit de seis millones de euros. Cuando Izquierda Unida y el Partido Socialista entraron en la Casa de las Panaderas, en junio de 2015, existía una deuda de 14 millones de euros, por lo que en estos cuatro años han conseguido devolver el verde a las cuentas municipales. No obstante, aún se mantiene un remanente de tesorería que alcanza los 27 millones de euros. Esto quiere decir que se ha pagado a los bancos, pero no se ha conseguido materializar toda la inversión prevista. Los arrastres de años anteriores superan los veinte millones de euros a día de hoy. Y esa es la principal crítica que la oposición realiza a la gestión económica del gobierno de izquierdas.

La liquidación de la deuda municipal ha sido uno de los pilares básicos de la estancia de Izquierda Unida y Partido Socialista al frente del Ayuntamiento de Zamora. En este año electoral, el balance económico resulta positivo para el bipartito, máxime atendiendo a la serie histórica de la última década. Las arcas municipales arrancaron el año 2008 con un debe de 19,3 millones de euros, un montante que se disparó hasta los 27 millones al año siguiente. La situación remontó sensiblemente hasta alcanzar otra vez la cifra de 19,3 millones en 2011, pero el 2012 fue un año nefasto para Zamora, cosechando un pico de deuda que rozaba los 28 millones de euros.

La problemática llegó hasta tal punto que obligó al Pleno de marzo de ese mismo año a aprobar un plan de ajuste para tratar de paliar la situación o, cuando menos, evitar que empeorara. Lo cierto es que las medidas restrictivas dieron sus frutos y al año siguiente, en 2013, la deuda disminuyó 7 millones hasta caer a los 20. Un año más tarde ya se situaba en 16 millones y cuando el bipartito IU-PSOE entró en el Ayuntamiento de Zamora esa cifra se aproximaba a los 14 millones de euros. El esfuerzo económico para la eliminación de deuda realizado por el equipo de Gobierno durante el 2015 permitió dejar lo pendiente a los bancos por debajo de los cinco millones y, en 2016, la ciudad se libró por fin de la deuda. Finalmente, el año 2017 arrojó un superávit de 11 millones de euros, mientras que en el pasado ejercicio 2018, el último completo del bipartito, la cifra descendió hasta los seis millones.

Analizamos el superávit del Ayuntamiento de Zamora

Analizamos el superávit del Ayuntamiento de Zamora

El alcalde, Francisco Guarido, saca como principal conclusión de estas cuentas que "la situación económica del Ayuntamiento de Zamora está saneada". En este punto, asegura que el grado de ejecución de ingresos es elevado y "eficaz", lo que se traduce en que "mejora la recaudación municipal sin que se produzca un incremento de la presión fiscal". El Consistorio, además, cumple con el techo de gasto, algo que "sigue perjudicando a ayuntamientos saneados" como este, según el regidor. "No lo entendemos, precisamente cuando tenemos más ingresos que gastos; debería modificarse de una vez la Ley Montoro para que, al menos, pudiéramos gastar lo que generamos", señala Francisco Guarido.