La plataforma contra las cláusulas suelo y los abusos bancarios de Zamora celebra la decisión que hoy ha adoptado el Tribunal Supremo, que rectifica sobre sus propias consideraciones y establece que son los bancos, y no los clientes, los que deben pagar los impuestos derivados de la firma de préstamos hipotecarios. Se trata del Impuesto de Actos Jurídicos Documentados, que oscila entre 1.000 y 2.000 euros dependiendo del total de la hipoteca, estiman desde la plataforma zamorana.

Cabe recordar que el Tribunal Supremo ha decidido que es el banco y no el cliente el que debe abonar el impuesto sobre actos jurídicos documentados en la firma de una hipoteca, corrigiendo así su doctrina anterior. En una sentencia fechada el pasado 16 de octubre, el alto tribunal establece que es la entidad prestamista, y no quien recibe el préstamo, el que tiene interés en inscribir la operación y elevarla a escritura pública.

De este modo, la sala tercera del Tribunal Supremo modifica su jurisprudencia anterior e interpreta el texto refundido de la ley del impuesto sobre transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados, y concluye que no es el prestatario el sujeto pasivo de este impuesto, sino la entidad que presta el dinero. El fallo responde al recurso presentado por la Empresa Municipal de la Vivienda de Rivas Vaciamadrid.

La plataforma zamorana recibe la noticia "con gran satisfacción, ya que muchos consumidores estaban esperando el fallo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea para enmendar una sentencia del propio Tribunal Supremo, que no reconoció los gastos. Ahora se volverán a formular demandas para reclamar este impuesto", augura el colectivo.