Los trabajos de seguridad que ADIF está realizando en la línea de ferrocarril que une Madrid y Galicia a su paso por Zamora, comprobaciones imprescindibles después de las obras que se han llevado a cabo durante los últimos días, han obligado a Renfe a retrasar la vuelta a la normalidad del servicio ferroviario. Así lo confirmó ayer la operadora ferroviaria a última hora de la tarde.

La conexión por tren entre Zamora y Galicia -y viceversa- iba a estar operativa, en principio, en la tarde del pasado lunes. Sin embargo, los problemas que causó el descarrilamiento de una de las máquinas que realizaban los trabajos en la vía obligó a posponer las previsiones de reapertura. El siguiente plazo que se dio fue ayer a las cuatro de la tarde, y tampoco se cumplió porque las comprobaciones de seguridad aún no se habían realizado íntegramente, según las explicaciones que da Renfe. Aunque es de prever que los trenes vuelvan a circulan pronto -es posible que incluso en la jornada de hoy-, Renfe no quiere "pillarse los dedos" y no da fechas para la vuelta a la normalidad.

Renfe "pide disculpas a sus clientes por las molestias a la vez que les pide comprensión". El traslado entre Zamora y Galicia se hará de momento por carretera. Renfe ofrece la posibilidad a los afectados de cancelar su billete sin coste y "espera restablecer el servicio tan pronto como exista autorización".