UPL pide la intervención del equipo de gobierno municipal para que cesen las prácticas poco éticas de la compañía suministradora de agua potable de la capital. Según explica la formación política, "previamente a la elaboración de cada recibo, los lectores de la empresa que gestiona el suministro de agua potable visitan los domicilios, anotando los dígitos marcados en los contadores de cada abonado. Deducida la cantidad reflejada en la visita anterior, se obtiene el número de metros cúbicos consumidos, con los que se elabora el correspondiente recibo, conforme a lo gastado".

Sin embargo, cuando el lector, por ausencia de todos los vecinos no puede acceder al portal donde se haya el cuadro de contadores, cosa bastante habitual especialmente en los bloques con escasos residentes, quedan sin anotar los metros cúbicos gastados y se elabora un recibo en el que no queda reflejado el consumo real. La situación puede, además, repetirse en la próxima visita, transcurridos dos meses.

"La sorpresa del usuario es mayúscula cuando cargan en la cuenta por consumo de agua una cantidad bastante abultada, comprobando que se debe a que han acumulado los datos que se deberían de haber facturado en diversos recibos periódicamente. Así un vecino, que no sobrepase normalmente el primer bloque de consumo, donde se incluyen los veinte primeros metros cúbicos, y cobrados a un precio razonable, puede encontrarse que por acumulación de los metros que deberían de haberse facturado con anterioridad, se le tarifiquen dentro del segundo o tercer bloque a un precio bastante superior".

UPL pide al equipo de gobierno del ayuntamiento de Zamora que vigile las prácticas poco éticas realizadas por la compañía concesionaria del servicio de agua municipal. Y que cargue con su responsabilidad debida, vigilando para que actúen con la profesionalidad que corresponde a una empresa concesionaria de un servicio municipal.