Más de 15 metros y más de 250 piezas, musgo natural y seco o arena conforman el nacimiento que alberga la panera de la Cofradía de Jesús Nazareno, situada en la calle Chimeneas. Este año, nuevamente, el cofrade Anselmo Esteban ha cuidado todos los detalles para que el belén "sea muy especial" y presenta numerosas alusiones a la hermandad.
En un primer término, el belenista ha situado un palmeral, pastores con sus rebaños, mujeres lavando o dando de comer a las ocas y a las gallinas que enlazan con un pueblo, donde se encuentra el portal con la Virgen María con el Niño en sus brazos y en sus proximidades, representados oficios como un tallista que está efectuado el anagrama de la cofradía.
En algunas de las casas, el belenista se permite la licencia de situar detalles relacionados con Jesús Nazareno. A través de las ventanas de las viviendas el espectador puede ver en cuadros el paso del Cinco de Copas, las Tres Marías o la Virgen de la Soledad sin olvidar al Merlú, un detalle del rostro de la Verónica y hasta ha incluido su propuesta que ilustra el cartel oficial de la Semana Santa 2018.
El nacimiento, inaugurado ayer, ha supuesto "más de tres meses de trabajo", afirma el belenista y semanasantero que desde hace semana y media ha efectuado "in situ" el montaje de todos los elementos con la ayuda de Jesús Salvador.
El nacimiento de la cofradía de Jesús Nazareno podrá conocerse hasta la jornada del 6 de enero desde las 19.00 hasta las 21.00 horas todos los días, con la excepción de Nochebuena, Nochevieja y la Noche de Reyes que no abrirá sus puertas, según han concretado desde La Mañana.
