La ordenación del territorio es uno de los pilares básicos para garantizar los servicios que presta en la provincia la Junta de Castilla y León, especialmente en el ámbito rural, como en su día estableció el presidente autonómico Juan Vicente Herrera. Así lo dijo ayer en Zamora el delegado de la Junta, Alberto Castro, quien destacó el "trabajo meticuloso" que se ha llevado a cabo para "tener una ley de ordenación que sea realista. "Realista con la realidad de los municipios y con la realidad de los más de 500 núcleos de población que tiene Zamora".

La Junta, indicó el delegado, "había establecido que era necesario hacer una ley de ordenación para garantizar los servicios. Y ayer mismo se aprobó en el Consejo de Gobierno en mapa que va a regir la ordenación del territorio y que determina qué servicios van a tener garantizados, donde van a tener tanto la sanidad, como agricultura, medio ambiente o educación", atendiendo a la realidad de Zamora.

Por eso, dijo, "lo que hemos pretendido desde hace ya muchos años es trasladar esa ley al conjunto de alcaldes, colectivos y vecinos" para que conozcan los servicios que presta la Junta de Castilla y León. "Ha sido un modelo consensuado políticamente, participativo, basado en el diálogo", indicó Castro. El delegado dijo que "garantizamos a los municipios el derecho a los servicios y la identidad propia a la hora de ejercer la autonomía municipal".

Castro indicó que "les hemos escuchado a todos sobre su realidad, y además se han atendido la mayor parte de las sugerencias". Dijo, en este sentido, que la nueva ley crea la figura de las mancomunidades de interés general, pero las localidades se pueden mantener en las mancomunidades actuales, sin ninguna penalización.

Con respecto a Cañizal y Vallesa de la Guareña, los dos pueblos zamoranos integrados en una unidad de servicios (Ubost) de Salamanca, "garantizamos que siguen perteneciendo a la provincia de Zamora, siguen dependiendo de la Delegación Territorial, de la Diputación de Zamora en sus competencias y en la mancomunidad de La Guareña, si bien la ley de ordenación les mantiene la singularidad que ellos han demandado y que llevan teniendo hace veinte años, que en el ámbito sanitario van a depender del centro de salud y el hospital de Salamanca, teniendo en cuenta que la autovía pasa por esos municipios y que están a veinte minutos de la capital charra". Es más, "es lo que han pedido en todas las alegaciones", insistió el alto cargo autonómico.

El hecho de que la sanidad sea uno de los servicios esenciales ha propiciado que sea uno de los factores fundamentales a tener en cuenta la adscripción de cada núcleo de población a una u otra Ubost, y lo que justifica, también el resto de excepciones de pueblos que están en una unidad distinta a la del ayuntamiento al que pertenecen.

En el caso de Cañizal y Vallesa el delegado dijo que el instituto de referencia para esos alumnos va a seguir siendo el de Fuentesaúco, lo que no impedirá a los padres llevar a sus hijos al centro de su elección, sea en Zamora o en Salamanca, "como ya se hace actualmente".

Lo mismo se ha hecho en el resto de la región, señala Castro. "Garantizamos los centros de los servicios esenciales, los institutos, los centros de salud, los servicios básicos en el ámbito territorial, en el medio rural", dijo el delegado. "Por eso creemos que (el mapa de la ordenación del territorio) es un paso importante a la hora de garantizar los servicios y que la gente sepa dónde debe ir para pedirlos y exigirlos. Para garantizarlos y no pueda venir un Gobierno regional futuro y pueda cambiar esa cartera de servicios, porque hay una ley consensuada que los garantiza".