Piezas artísticas basadas en las escenas bíblicas y extrabíblicas que hacen referencia a la familia de Jesús, a distintos momentos de su vida, al taller de Nazaret o al momento en el que disputa con los doctores en el templo de Jerusalén que hace alusión a su educación y la piedad, el momento en el que Jesús descendido de la cruz es puesto en el regazo de su madre, protagonizan la exposición "Sagrada Familia", abierta en el Museo Diocesano.

La novena muestra temporal reúne en la bella iglesia de Santo Tomé trece piezas procedentes de iglesias y conventos de la diócesis así como varios cuadros cedidos por un coleccionista particular de la capital.

Por primera vez en las exposiciones que cada semestre proponen desde el Museo Diocesano se conjuga once pinturas, dos ellas de un particular, y dos esculturas, datadas entre el siglo XIV y el XX.

Entre las piezas expuestas el director del Museo Diocesano, José Ángel Rivera, destaca una escultura en madera tallada, policromada y dorada del siglo XIV, procedente de la iglesia de Malva, donde aparece santa Ana sentada, a un lado la Virgen niña y en su regazo el niño Jesús. "Es una obra preciosa en la que aparece la abuela, la madre y el hijo", describe el director del Diocesano, José Ángel Rivera de las Heras.

El delegado diocesano de Patrimonio remarca también un lienzo procedente del convento de las Dueñas. "Lo firma en el reverso Antonio Sarnelli en 1748 y representa a la Virgen con el Niño, san José con la vara florida y a su lado san Joaquín y santa Ana. También aparecen santa Isabel y san Zacarías con el pequeño Juan bautista. La obra también es una trinidad porque aparece Dios padre arriba y el hijo abajo y entre ambos, una paloma que simboliza el espíritu santo", puntualiza el sacerdote quien también alaba la calidad de las dos aportaciones de un coleccionista particular "Visitación", atribuida por el historiador de arte Enrique Valdivieso a Francisco Antolínez un pintura al óleo sobre lienzo de la segunda mitad del siglo XVII y "San José y la Virgen María buscando posada", del círculo de Antolínez, que representa el momento en el que buscan posada. "Es un tema actual los sin techo y las personas que tienen dificultad para encontrar un hogar", remarca Rivera de las Heras.

La novena exposición del Diocesano, que podrá visitarse hasta finales de mes del junio, aborda plásticamente el tema de la familia porque la diócesis de Zamora ha propuesto nuevamente este asunto como objetivo pastoral para este curso. "Queremos hacer ver que la familia cristiana tiene una dignidad, una grandeza y belleza importante para la Iglesia y la sociedad actual", esgrime Rivera.

Además, por primera vez el Museo Diocesano junto con las Delegaciones de Catequesis, de la Familia y de Enseñanza "realizaremos material catequético que facilitaremos a los niños y adolescentes de catequesis y a los feligreses de las parroquias para que puedan venir a ver la muestra y sacarle el jugo que contienen las representaciones plásticas", adelanta el responsable de Patrimonio de la diócesis zamorana.