El Ayuntamiento de Zamora ha decidido seguir las recomendaciones del Ministerio del Interior para evitar ataques como el acaecido en Berlín hace una semana y por ello reforzará la seguridad en los principales accesos a la capital. Pese a que la ciudad no es un lugar donde el riesgo para la seguridad ciudadana sea excesivamente alto, sí que consideran desde el Consistorio que conviene tomar precauciones siguiendo las instrucciones marcadas por la Policía Nacional. La decisión municipal es la de no instalar bolardos en los principales entornos peatonales puesto que la Policía Municipal mantendrá bien vigilados a los camiones de gran tonelaje, que son los utilizados por los terroristas para perpetrar sus atentados. Las precauciones se extremarán el próximo día 5 de enero, coincidiendo con la Cabalgata de los Reyes Magos.

Las entradas y salidas de la capital estarán permanentemente vigiladas durante las fechas más señaladas de estas Navidades. Esa es la decisión acordada entre la Concejalía de Seguridad Ciudadana y la Policía Municipal tras el llamamiento del Ministerio del Interior a los ayuntamientos de cara a extremar las precauciones al objeto de evitar atentados como los de Berlín y Niza. El edil titular del área, Antidio Fagúndez, así lo ha explicado a este diario. "Lo que hemos decidido es poner servicios especiales en los principales accesos a la capital. La alerta antiterrorista se cierne sobre toda España, pero es evidente que es difícil que algo así ocurra en Zamora. En cualquier caso, sí que vamos a seguir las recomendaciones del Ministerio del Interior", ha indicado.

La labor de la Policía Municipal consistirá en intensificar la vigilancia en los puntos de acceso a la capital, con especial atención a los camiones de gran tonelaje. Este tipo de vehículos son los utilizados por los terroristas para perpetrar sus ataques, puesto que en caso de disparos a las ruedas, el sistema de tracción les permitiría seguir en marcha, mientras que en otros de dimensiones más reducidas serían neutralizados de inmediato. Por eso, el objetivo es extremar las precauciones sobre este tipo de camiones para evitar que accedan al casco urbano en los momentos en que se prevean grandes aglomeraciones de gente durante estas fiestas.