Empiezan las fiestas del barrio de Pinilla, que se extenderán hasta el próximo domingo. El presidente de la Federación de la Asociación de Vecinos de Zamora y de la Asociación de Vecinos de Pinilla, Artemio Pérez, presenta el programa de festividades. Las principales novedades son el torneo de fútbol sala y la personalidad escogido para el pregón de este año: Antonio Martín Alén, presidente de la Junta pro Semana Santa. Asimismo, Pérez aborda las principales polémicas con las que ha lidiado en el último año.

-¿Qué nos depararán estas festividades?

-Tendremos de todo un poco. Son unas fiestas planificadas para todas las edades, desde los más pequeños a los mayores de nuestro barrio y todos aquellos que se quieran acercar a disfrutar de estos días. Contamos con juegos y actividades para los niños. Verbenas, cante y distracciones muy dispares para los adultos.

-¿Cuál ha sido el criterio para escoger al presidente de la Junta pro Semana Santa como pregonero?

-Nos gustan las personas que trabajan de una forma altruista, sin pensar en los beneficios o la remuneración que pueden obtener y que únicamente se involucran con el fin de actuar en pos del beneficio común. Antonio Martín Alén entra dentro de esta descripción. Es un ciudadano que lucha por un bien tan preciado y estimado por los zamoranos como es la Semana Santa. Y en su entrega ha conseguido algo hasta ahora inaudito: aunar todas las cofradías para reivindicar unos puntos en común. Además, ahora están intentando desarrollar el nuevo proyecto del museo, obra fundamental que necesitaba la ciudad desde hace tiempo. Creo que con este curriculum era un candidato idóneo para dar comienzo a las fiestas de Pinilla.

-¿Están los vecinos contentos con el programa de este año?

-De momento no hemos recibido ninguna queja. Pero sería extraño que se manifestara alguien respecto a las actividades previstas, pues la comisión de fiestas siempre se reúne previamente con las peñas y consensuamos las celebraciones y espectáculos pertinentes. El perfecto ejemplo lo tenemos este año, una de las peñas propuso un torneo de futbol sala y se ha organizado en connivencia con la comisión. Por supuesto, cuando una iniciativa no se puede acometer se lo comunicamos a las peñas y les explicamos los porqués.

-¿Qué supone el barrio de Pinilla para Zamora en su conjunto?

-Simplemente es un barrio más. En este caso, mi barrio, del que me siento muy orgulloso de pertenecer. Y además, una entrada y salida de la ciudad muy vistosa.

-¿Considera su polémica con Cristoph Strieder, concejal de Barrios, resuelta o sigue pensando que debería dejar de ser vocal de la Asociación de vecinos del barrio de Olivares?

-Mantengo mi opinión, creo que lo más razonable sería que el responsable de Barrios dejase su puesto en la asociación de Olivares y se centrara en las labores de su Concejalía. No obstante, me gustaría romper una lanza a favor del alcalde y de Javier Novo por las buenas formas que han tenido a la hora de intentar tender puentes entre Strieder y yo, y conseguir romper el hielo que se había impuesto entre los dos.

-¿Cree que el Ayuntamiento no está atendiendo correctamente las necesidades de Pinilla y otros barrios?

-En Pinilla realmente no. Y además no se han respetado algunos acuerdos. El Ayuntamiento pactó con Faveza que antes de realizar obras en los barrios se consultara con las asociaciones cuáles son los lugares que mayor prioridad para acometer los arreglos pertinentes. No obstante, esto no se ha cumplido y los trabajos se están produciendo con el único mandato del equipo de Gobierno, apartando a los vecinos del proceso participativo en la toma de decisiones.

-¿Qué necesidades tiene Pinilla aún por satisfacer?

-Pinilla tiene tres necesidades, ya muy reivindicadas a lo largo del tiempo: la construcción del centro de salud en la zona de Pinilla, que no solo estaría orientado a la población del barrio, sino que cubriría las necesidades de las localidades de Villaralbo, Sanzoles, Arcenillas y el resto de municipios de las inmediaciones; el centro de día tan prometido por todos los partidos que se presentaron a las últimas elecciones municipales, y que parece que cuando pasan los comicios se convierten en un brindis al sol; y por último, ¿qué pasa con la estrechez del puente de la calle Cañizar? Es un acceso a la autovía y hay un tráfico muy intenso que se ve ralentizado por las medidas del paso. Estas son tres necesidades capitales, que deben tener una respuesta rápida por parte del Ayuntamiento. Y de no ser así, tomaremos medidas.

-¿Qué tipo de medidas serían?

-Principalmente la recogida de firmas y la acción colectiva ciudadana. Lo que no se puede aguantar es que pidamos una reunión con el Ayuntamiento y tarden tres meses en recibirnos. Es entendible que las cosas no se hagan de hoy para mañana, y entiendo las limitaciones presupuestarias, pero no podemos permitir que las promesas caigan en saco roto. De momento vamos a darle un tiempo al Guarido, luego veremos qué soluciones llevamos a cabo.

-¿Cuántos años lleva siendo presidente de Pinilla?

-Desde el 20 de junio de 1988. Un total de 28 años.

-¿Se plantea dejarlo y dar paso a otra persona después de tanto tiempo?

-En septiembre de este año dejo Faveza y la presidencia de Pinilla. Es más, estoy deseando que llegue el otoño para dejarlo todo. Voy a convocar la asamblea y en el caso de que no haya ningún candidato en Pinilla considero que lo mejor es contratar una gestora que se haga cargo de la asociación. En septiembre lo dejo.

-Las asociaciones de San Frontis y Carrascal cargaron contra usted diciendo que no hablaba con ellos y que estaba en contra de solucionar los problemas de transporte público en estas zonas. ¿Es verdad esto que le achacaban?

-Bueno esto no es así, por supuesto que estamos de acuerdo con que el Plan de Movilidad abarque las zonas de San Frontis y Carrascal. Pero incidimos en que no se amplíe la línea hasta Carrascal.

-¿Cuáles son los logros de su etapa de los que se siente más orgulloso?

-No creo que deba sentirme orgulloso de nada. Porque lo que se ha conseguido no es una victoria personal, sino de los vecinos y las asociaciones. Si no es por nuestros conciudadanos no estaríamos ahí. En eso consisten exactamente las asociaciones de vecinos, en unirse para luchar y obtener unas mejores condiciones para todos. En ese aspecto, no puedo arrogarme el mérito que no solo me corresponde a mí. Cada una de las victorias que hemos obtenido es una victoria grupal. Una persona sola no podría haber logrado todo esto.

-¿Y cuáles sus errores más destacables?

-Ni siquiera los puedo enumerar, los he tenido a manta. Si no me confundiera no sería humano. El único error que destacaría por encima del resto es no haber logrado cubrir las necesidades de los vecinos de mi barrio, después de que ellos hayan confiado en mí.