La concejal de Personal y tercer teniente de alcalde del Ayuntamiento, Laura Rivera, salió ayer al paso de las críticas del PP sobre la ordenanza que regula el acceso a las guarderías municipales, en las que el concejal Víctor López de la Parte aseguraba que la normativa "discrimina a los más desfavorecidos" y acusaba a IU y PSOE de "vender humo sin resolver nada". La representante del equipo de Gobierno apostilló que "la ordenanza da pena, favorece a las personas con una situación más favorable como aquellos padres que tengan, los dos, un puesto de trabajo". Además, López de la Parte aseveraba un día antes que "esta es la forma de trabajar de Izquierda Unida y del PSOE: vender humo y grandes titulares a la prensa sin que luego se resuelvan los problemas de los vecinos".

Rivera recordó a Víctor López de la Parte, concejal del PP que ha llevado el peso de la palabra en este asunto, que "la ordenanza que tenemos ahora es la que impuso el PP y que votó él (Víctor López), aunque ahora la critica. Dice que no la hemos cambiado y es cierto que no lo hemos hecho. Pero ha sido por cuestiones técnicas y de plazos, porque está en proceso de cambio". Laura Rivera añadió que "junto con la ordenanza de guarderías tenemos que cambiar la de precios públicos para que pague más el que más tiene, pero hay que hacerlo con unos plazos" legales. En este sentido, "cambiar los precios públicos es mucho más lento porque la nueva norma debe tener un periodo de exposición más elevado. Lo vamos a cambiar, pero cuando se pueda hacer", subrayó Rivera.

Por último, la edil de Izquierda Unida y tercera teniente de alcalde aseguró que "el equipo de Gobierno acepta las críticas" del resto de los grupos pero "no admitimos la más mínima crítica en este tema de aquellos que nos dejaron una ordenanza de pena".