Empresarios desde el siglo pasado. "Era algo que no se podía dejar pasar", argumenta José Luis Prieto, actual responsable del comercio Calzados Los Valentines, ubicado en la plaza de la Constitución. El comercio data de la década de los cincuenta, siempre en la misma ubicación y siempre con la misma filosofía, la de ofrecer "calzados de ancho especial con calidad". La tienda la puso en marcha el abuelo del actual responsable, "Valentín Prieto y su mujer, María Teresa Iglesias, que se la dejó a mi padre, José Luis Prieto Iglesias, para luego hacerme cargo yo".

Lo cierto es que la marca Los Valentines es conocida del consumidor zamorano. "Viene de hace más de un siglo" con varias tiendas repartidas por el centro de la ciudad. Primero fue una tienda de tejidos en Sagasta, abierta aproximadamente en el año 1890. Después llegó el turno de otro comercio de tejidos y confecciones que estaba ubicado en el número seis de la calle Santa Clara. "Tenía la obligación moral de continuar con la tradición familiar", argumenta el gerente de la zapatería.

La tienda es una de las pocas que ofrece zapatos de ancho especial en Zamora. "Tenemos un público muy concreto, muy fiel, pero además en los últimos años hemos conseguido ampliar la clientela", apunta José Luis Prieto. Así, "estamos abiertos a todo el público en general". Además, en los últimos tiempos se ha ampliado el abanico de marcas, "siempre mirando al mercado español". Pitillos, Fluchos, Piesanto o Doctor Cutillas son algunas de las actuales.

Es también destacable que el empresario que actualmente se hace cargo del negocio no solo se dedica a esto porque, como él mismo recuerda, "soy informático y trabajo como tal". Sin embargo, la sangre pesa, "es algo que he visto desde pequeño, primero con mi abuelo y luego con mi padre, y quería seguir con ello". Incluso se ha dado el caso de que varias generaciones de la misma familia coincidieran en el negocio. "Yo estuve contratado por mi padre bastantes años", recuerda ahora Prieto. Pese a todo, el negocio ha cambiado en los últimos tantos ya que Prieto ha llevado a cabo una reforma en el local, redistribuyendo el espacio disponible.

El emprendedor compatibiliza su trabajo en la tienda con otro que lleva a cabo en la Fundación La Caixa, donde da clases de informática dentro de los programas sociales de la entidad. "Lo compatibilizo bien", asegura, "y que siga así".