Aún con la voz quebrada por el paso de la vida y de los años, el zamorano Jesús Hilario Tundidor demostró ayer que sigue siendo poeta en su tierra. Enmarcado dentro de las Ferias y Fiestas de San Pedro, el profesor Fernando Primo quiso elogiar la figura del poeta con la conferencia "Una vida de poesía" para celebrar el ochenta cumpleaños de Tundidor.

Así, con el salón de actos de la Alhóndiga lleno hasta la bandera y rodeado de amigos, el poeta se mostró muy emocionado con el homenaje que recibía en su tierra un año después de ser reconocido con el Premio de las Letras de Castilla y León. "Poder decir vuestros nombres sería el mejor poema", les dijo el poeta agradecido a los antiguos alumnos, compañeros y admiradores que quisieron acompañarle durante la conferencia.

Antes que eso, Fernando Primo fue el encargado de conducir el homenaje como principal promotor del acto, que contó con la presencia en la mesa de la concejal María Eugenia Cabezas, como representante del nuevo equipo de gobierno del Ayuntamiento, otro de los organizadores del acto. Además de la conferencia de Primo y de la lectura de poemas a cargo del propio poeta, actos centrales del homenaje, ayer también se pudo ver una pequeña exposición organizada por el mismo Primo en el que mostró al público su gran colección particular de poemarios y antologías del poeta así como de algunos de los artículos de prensa y entrevistas concedidas a distintos medios.

Durante la conferencia, que sirvió como introducción de la lectura poética, Fernando Primo se valió de los propios versos de Tundidor para hacer un repaso por su vida y su obra. No obstante, como el mismo profesor recordó, "se trata del poeta vivo más importante de la poesía española actual, como así lo reconocen muchos de sus compañeros". El mismo primo lamentó que este homenaje "no se haya realizado antes" debido a que ya hace un año que el poeta fue distinguido con el Premio de las Letras de Castilla y León y con la placa instalada en el Ayuntamiento en la calle de las Damas, lugar de nacimiento de Tundidor. Primo hizo un repaso por toda la vida del poeta, por sus publicaciones y por la excelsa galería de premios que ha cosechado durante los cincuenta años de labor poética, que le han servido para atesorar los galardones más importantes de la poesía española como el premio Adonais, que obtuvo en 1962. También hizo un esbozo de su figura con sus propias palabras y versos, condensados en la lectura de unos pocos poemas y escritos, así como la recopilación de nueve definiciones de poesía dadas por Tundidor en distintos libros y entrevistas.

Tras la conferencia, agradeciendo a Primo sus palabras y al público su presencia, el poeta comenzó una lectura de sus obras seleccionadas de memoria durante la intervención de Primo. Así, un emocionado Tundidor se declaró muy halagado por el homenaje en su tierra, un lugar que, como él mismo reconoció, "ha añorado siempre que estuvo fuera". Unos poemas de su juventud -cuando hizo un guiño a las fiestas de San Pedro y a sus buenos recuerdos de entonces-, unos sonetos o la lectura del poema "El olor de la lluvia" como homenaje al clima imperante ayer fueron algunas de las elecciones del zamorano que, con una vida de poesía encima, aún conserva versos para rato.